En el reportaje "El negocio del fútbol" de El Mundo TV ofrecido este viernes por Telecinco eché de menos a Edward Teach, el pirata Barbanegra. Nada más reconocerle, las tripulaciones rivales rendían las embarcaciones sin luchar. Dicen que a sus propios hombres los encerraba a oscuras en la bodega del barco y, por debajo de la mesa, disparaba al azar en dos ocasiones sólo para recordarles quien mandaba allí. Llevaba siete pistolas de un kilo cada una sobre el pecho y se limpiaba las manos con una larga barba que, cuando se trataba de conquistar a una mujer, la adornaba con un montón de trenzas. Cuentan que instantes antes de iniciar un abordaje se colocaba cerillas encendidas sobre el pelo. Un fifiriche el tal Barbanegra, un baldragas en comparación con todos los elementos que fueron desfilando por el reportaje en cuestión.
Blanqueo de dinero, chantaje, compra y venta de partidos, comisiones, fácil y rápido enriquecimiento al olor del negocio del fútbol... Nada que no conociéramos o intuyéramos, pero que ahora pudo comprobar todo el mundo con sus propios ojos. El olímpico Herminio Menéndez "regateando" con el Sporting de Gijón de sus amores. El presidente del club asturiano reconociendo que le concedieron obras por ser él quien era. Marcos Alonso, ex entrenador del Zaragoza, dando a entender que la plantilla maña es confabuló para descender a Segunda y un intermediario confesando que Joan Gaspart se llevó dinero del fichaje de Anderson. Y otro más -éste autocatalogado como serio, y que llamó al anterior "poco profesional"- definiendo su negocio como un mercadillo de "carne humana". ¿Era o no era un angelito el tal Edward Teach comparado con esta tropa? Alguno de los que salió en la televisión le habrían cortado la barba sin inmutarse con tal de sacarse el cinco por ciento.
Parece que Herminio Menéndez ha pedido perdón, y eso está muy requetebien. Pero al margen del perdón (que no fue espontáneo sino provocado por el "pastel" que todos pudimos presenciar por Tele Cinco), la Federación Española de Fútbol, la Liga de Fútbol Profesional y sobre todo, si es que sus innumerables ocupaciones se lo permiten a nuestro secretario de Estado, el Consejo Superior de Deportes tendrían que haber dado ya pasos diáfanos en la dirección de crear una comisión de investigación. No es que algo huela a podrido en Dinamarca, no, sino que Dinamarca está con la mierda al cuello. Y si la ministra no mueve un solo dedo habrá dado licencia para abordar. Todos juntos: "¡ron, ron, ron, la botella de ron"!... Lo dicho, eché de menos a Barbanegra.
En Deportes
0
comentarios
Servicios
- Radarbot
- Libro