¡Si el barón de Coubertin levantara la cabeza!... Si hay algo que quedó hace tiempo definitivamente erradicado del interminable proceso que se sigue para designar la sede olímpica es precisamente el tan cacareado espíritu olímpico, el romántico fair play. El juego no es nada limpio sino tremendamente sucio, y esto es así por una razón tan sencilla como que el negocio, la pasta, el money, están asegurados para aquellos afortunados mortales a quienes les toque la lotería. Y para obtener el premio gordo de esa lotería se difama más rápido, más alto y más fuerte que el otro candidato. ¿En qué quedó el "citius"?... ¿Para cuándo dejamos el "altius"?... ¿Dónde nos metemos el "fortius"?... Si no fuera porque el Comité Olímpico Internacional está demasiado ocupado en solucionar sus propias corruptelas internas, debería meterle mano cuanto antes a este juego que de fair tiene lo que yo de galáctico de F.P.
Aclarando, que es gerundio. Si lo que quiere el COI es designar una sede olímpica que no esté amenazada por la lacra del terrorismo ya puede ir abandonando esa idea. Dos medios de comunicación del teórico prestigio internacional que tienen The Times o la CNN, en una utilización absolutamente espuria de una salvajada cual es la de colocar un coche bomba cargado con 30 kilos de cloratita con el objetivo de provocar la mayor masacre posible, han hablado de la inseguridad que se vive en Madrid, y también, en un claro síntoma de desinformación o de simple mala intención, de "grupos independentistas" y no de "banda de asesinos terroristas", que es lo que realmente son. ¿Vale todo?...