Iñaki Sáez ha cometido su primer error de bulto desde que estamos en la Eurocopa, y además lo ha hecho en un asunto realmente intrascendente, un tema de poco calado. Hoy nos ha sorprendido a todos admitiendo que anoche se produjo un "debate" ("yo respeto los vuestros", ha dicho con un poco de retranca, "admitid también los míos") entre todos los técnicos de la selección, y que, después de oír todas las opiniones, ha decidido no adelantar hasta mañana el equipo titular que jugará contra Grecia. Si lo que pretendía el seleccionador era cortocircuitar las polémicas "Raúl-Valerón", "Baraja-Xabi Alonso" o "Morientes-Torres", yo creo sinceramente que se equivoca. De hecho, al cambiar veinticuatro horas antes una costumbre que había llevado a rajatabla hasta la fecha, lo único que ha conseguido Sáez es realimentar y agrandar precisamente dicho debate. ¿Por qué no querrá adelantar el equipo?... ¿Será porque va a haber más de dos cambios y quiere sorprendernos a todos?... ¿Podría ser Joaquín?... ¿O Luque, quizás?... ¿Quién será, será?
También se puede sostener todo lo contrario: ¿Para qué vamos a ser justamente los españoles quienes adelantemos el equipo titular del partido del día siguiente?... Eso tendría sentido si, de cara a una cita tan importante como ésta, Sáez hubiera decidido aplicar el mismo método de trabajo en todos y cada uno de los encuentros; contra Grecia, sí, pero también contra Rusia o Portugal. Sin embargo, el seleccionador accedió a darnos el equipo titular que jugaría contra los rusos en el debut español, y ahora cambia después de una victoria. ¿Qué habría sucedido en caso de derrota?... Sostiene Sáez que Grecia jugará contra España en función del equipo que él presente mañana, pero todo el mundo sabe ya -y mucho más a estos niveles- cómo y con qué futbolistas y sistema salta al césped nuestra selección. ¿Entonces?
Como me decía Rafa Alkorta a las dos y media en "El Tirachinas" especial de la Eurocopa, "ojalá no se le echen encima a Iñaki por una cosa tan tonta". Lo suscribo. Ojalá no se le echen encima por una cosa tan tonta, aunque yo tengo que decir que me parece un error importante de estrategia y también, por qué no decirlo, un signo de debilidad que me inquieta. ¿No damos el equipo titular porque jugamos contra la superpotencia griega?... La palabra que define a Iñaki Sáez es "normalidad", y eso se ha notado en el ambiente de la selección nacional. Normalidad con la prensa. Normalidad con los futbolistas. Normalidad a la hora de explicarlo todo. Hasta hace unas horas era normal que Iñaki Sáez ofreciera el equipo titular un día antes de los partidos. Ahora ya no. Ojalá eso nos sirva, al menos, para conseguir un buen resultado contra Grecia, pero insisto en que me parece un error. Y el primer signo de debilidad.