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Indices para todo. Fríos como el hielo. El Euribor y el Mibor, el Ibex 35 y el Dow Jones. El Nasdaq, el IRMH, Nikkei y Ceca. Y siglas, muchas siglas. Vivimos enterrados en siglas. La OTAN (NATO), UE, BBVA, SCH, IPC, y así hasta el infinito. Ni siquiera la burocracia deportiva ha sido capaz de escapar de la "siglamanía". UEFA, FIFA, LNFP, COE, FEF... Un lío. El otro día leí que hay un índice, el "McDonalds", que calcula el nivel de vida de los países por el número de hamburgueserías que hay de dicha franquicia. El índice MRR Europa es otro más. Este en concreto establece una clasificación por equipos a través de sus participaciones en las diferentes competiciones continentales. Según eso, el Real Madrid sería el primer clasificado (3117 puntos) y acabaría de eliminar al tercero, el Bayern de Munich, para jugárselo todo a una carta contra el séptimo, el Fútbol Club Barcelona. Pero una eliminatoria como la que va a disputarse los días 23 de abril y 1 de mayo es, definitivamente, mucho más que eso, más que un índice.

Santiago Nolla, director de "El Mundo Deportivo", acusa hoy a la prensa madrileña de calentar la eliminatoria contra el Bayern y espera que ahora no suceda lo mismo. ¿Por?... ¿A santo de qué?... Él mismo titula hoy la crónica del encuentro con un "Al infierno del Bernabéu" que me parece bastante caliente. Hoy he hablado con Canario, mítico jugador merengue que estuvo en las dos eliminatorias de la Copa de Europa contra el Barcelona en los años 60, y al hablarle del "equipo del Régimen" ha empezado a hervir en directo: "¿Y el penalti que me hicieron a mí, o el gol anulado a Marquitos?". Parecía que hubiera sido ayer, y han pasado más de cuarenta años desde aquello. Esto es fútbol.

Frank de Boer no ha debido leer hoy "MD" porque, tras el entrenamiento culé, ha dicho dos cosas. La primera, que el Barcelona ya está en la final. Y la segunda, que Luis Figo provocó la tarjeta amarilla para no tener que jugar el partido de ida en el Nou Camp. ¿Arde o no arde este Barcelona-Madrid? Está escrito que debe ser así. Bendito Salihamidzic, el mejor terapeuta merengue, que tuvo a bien decir aquello de "se cagan en los pantalones". ¿Qué habría sido del Real Madrid-Bayern de Munich del miércoles sin esas oportunas palabras? Uli Stielike, aquel "panzer" germano que paseó ocho años su casta por el estadio Santiago Bernabéu, me comentó el otro día: "Ahora empieza la verdadera Copa de Europa". Tenía más razón que un santo. Ahora empieza. Y viene calentita.

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