Menú
Juan Manuel Rodríguez

Un "ciudadano del mundo" contra el serbio Antic

Hay que agradecerle a Radomir Antic que sea valiente y se atreva a expresar públicamente lo que no se atreve a decir ningún entrenador español salvo, muy tímidamente, Javier Clemente

¡Qué poquito nos ha durado Luis Aragonés!... Han tenido que pasar sólo cinco partiditos de nada para que el sabio, que tenía el "culo pelado" en mil batallas, el donante de sangre, el hombre que prometió talante y consenso (la "gran sentada" que quedó reducida al final a conciliábulo veraniego en cuclillas), se nos haya venido tan abajo, tan abajo, tan abajo, que, tras el bochornoso empate ante Lituania, sólo atine a decir la chorrada del siglo: "el de Alemania va a ser nuestro Mundial"... Luis asegura que él es un "ciudadano del mundo", pero a continuación desacredita la opinión de un entrenador de fútbol por el simple hecho de haber nacido fuera de España. ¿El mundo según Luis empieza y acaba en el barrio de Hortaleza?... Radomir Antic le podrá caer mejor o le podrá caer peor (a mi me parece un ególatra de mucho cuidado), pero lo que no veo yo es cómo pueda excluirle de ningún debate futbolístico (tampoco del que afecta al fútbol español) el hecho de que haya nacido en Serbia.
 
El caso es que algunas de las opiniones expresadas por Antic, que probablemente es más "ciudadano del mundo" que Luis porque lleva muchos más años que él fuera de su país, tienen mucho sentido, aunque al seleccionador español le hayan tocado especialmente la fibra. Por ejemplo, en lo referente a la ausencia de un estilo propio. Este problema no empezó, desde luego, con el nombramiento de Luis, pero sí se ha acentuado desde su llegada. En cinco partidos, Aragonés ha probado con cinco alineaciones absolutamente distintas. Del 4-4-2 hemos pasado al 4-2-3-1. Luis empezó con Cañizares como portero (un error) y luego pasó a Casillas. Un día Joaquín es titular y al siguiente se queda fuera de la convocatoria, y cuando un partido va mal se pasa de jugar con un sólo delantero a hacerlo de repente con cinco. Sólo Raúl es insustituible, pero al madridista pueden acompañarle Torres, Luque, Reyes, Tamudo o Morientes... La única apuesta novedosa y estable de Luis es la convocatoria del deportivista Víctor, ninguna más... Un lío.
 
Dos cosas pueden deducirse, por tanto, de los cinco partidos que Luis Aragonés lleva dirigiendo a la selección nacional: no existe un estilo (personalidad, esquema o como se prefiera llamarlo) definido, y España juega en función del rival o de cómo marche el partido. Yo estoy totalmente de acuerdo con Antic y no he nacido en Serbia sino en Madrid. Y pongo mi carné de periodista a disposición del seleccionador por si fuera menester. Hay que agradecerle a Radomir Antic que sea valiente y se atreva a expresar públicamente lo que no se atreve a decir ningún entrenador español salvo, muy tímidamente, Javier Clemente.

En Deportes

    0
    comentarios