La propuesta del ministro de Justicia, Fernández Bermejo para el supuesto de que el PSOE gane las elecciones, según la cual dejará de ser necesario hacer oposiciones para acceder a la carrera judicial, parece una mera ocurrencia, pero no es así. La propuesta del ministro es parte de una mentira, en su definición más tradicional: decir lo contrario de lo que se piensa con intención de engañar.
El ministro dice que hay cada vez menos opositores a la carrera judicial y fiscal: falso. En la página web que publica el Ministerio que, de forma transitoria, dirige este abulense, se puede comprobar que la inmensa mayoría de los licenciados en Derecho que oposita en España, decide hacerlo a la carrera judicial y fiscal: 3698 admitidos en 2007. Una desproporción respecto a otras oposiciones, cuyo seguimiento puede hacerse en la misma página: 854 admitidos en las listas del cuerpo de Registradores de la Propiedad, 1103 a Notarías o 150 a Abogados del Estado. Es posible que haya menos licenciados en Derecho, pero eso afecta por igual a todas las oposiciones.
El ministro dice que hay que arrebatar a los despachos de las firmas más prestigiosas los mejores alumnos de las universidades: falso también. Un simple viaje por las páginas salmón de los periódicos en fin de semana nos demuestra que estos despachos valoran los años que se haya estado hincando los codos con las oposiciones. De hecho, el Consejo General del Poder Judicial emite unos certificados que dan fe de las veces que un opositor se ha matriculado, presentado a algún examen y si ha aprobado alguno. El mensaje "Se valorará el estudio de oposiciones" es común en muchos anuncios de los grandes despachos, y de los pequeños.
El ministro dice que hay que educar a los jueces en los valores constitucionales: falso total. Estoy harta de oír esa tontería por parte del partido socialista. Son como el niño del anuncio de la fruta. "Mamá, si te gusta tanto la Constitución y es tan buena, ¿por qué te la quieres cargar?". El presidente Rodríguez Zapatero no puede decirnos que con Educación para la Ciudadanía va a enseñar valores constitucionales cuando está estrujando al Tribunal Constitucional para colar la ley más inconstitucional de la democracia, el Estatuto de Cataluña. El ministro tampoco va a enseñar valores constitucionales a los futuros jueces por el mismo motivo.
Ya sabemos que el ministro tiene problemas para diferenciar la izquierda y la derecha y a nuestros padres y a sus hijos, pero a un guardián de los valores de la izquierda como él debería darle vergüenza decir lo que ha dicho. Las oposiciones no garantizan jueces o fiscales más listos ni más preparados, que en algunos casos también, pero sí son un sistema igual para todos. Actualmente cualquiera puede llegar a ser juez o fiscal, o notario, si estudia. Con la propuesta bermejil, no.
¿Por qué miente Bermejo? Porque lo que en realidad pretende es filtrar a los futuros jueces. Menuda novedad.
PD: Ciudadanos es ese partido al que en Cataluña se le insulta por ser español y que no sirve para la política española por ser catalán.
