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Martín Higueras

Golpe de efecto de McLaren

Parece que el equipo británico ha encontrado la solución para enfrentarse a los Red Bull y eso le ha permitido instalarse no sólo en los dos primeros lugares del mundial de pilotos sino también en el de Constructores.

Sin duda ha sido el fin de semana de Lewis Hamilton. Pero eso sí, encontró a un durísimo rival durante buena parte de la carrera: Fernando Alonso ha reencontrado -aparentemente- las buenas sensaciones de su Ferrari y durante buena parte de la persecución a su ex compañero de equipo pareció que podía arrebatarle la victoria. No ocurrió y sólo levantó el pie del acelerador - seguramente para ahorrar el desgaste de su motor y neumáticos- cuando Button le sorprendió aprovechando el adelantamiento sobre un doblado cuando faltaban aún 14 vueltas para el final.

Pero creo que la victoria de Hamilton y el 1-2 de McLaren han sido largamente merecidos básicamente porque fueron muy rápidos (algo bastante evidente) pero también porque acertaron de planeo en la estrategia. Los dos pilotos largaron con los neumáticos más blandos -un componente que en Montreal parecía degradarse rápidamente y sufrir de excesivo graining- para luego calzar en sus dos paradas los neumáticos duros, algo que también hizo Alonso. Es sin duda lo que se necesitaba pero Red Bull no se dio cuenta. Es posible que se haya tratado de su peor planteamiento y carrera del año. Webber partió con el componente duro y repitió en su primera parada, dejando para su último stint -bastante largo por cierto- los blandos. Vettel eligió ese componente en la segundo tercio para usar al final los duros.

Lo cierto es que yo he disfrutado muchísimo de esta carrera. En todo momento hemos tenía pelea por los primeros puestos. El duelo entre Hamilton y Alonso no se hizo esperar (cuando aún no eran punteros) no sólo en la pista sino también en la calle de boxes. Como siempre, este tipo de maniobras suelen ser polémicas pero la verdad es que no vi nada raro esta vez y Alonso ganó de una manera completamente legal la posición, adelantando a Hamilton sin mayor discusión. El británico intentó impedirlo como es natural pero el español fue más listo. Además, Alonso logró hasta cinco mejores vueltas, una clara muestra de que el Ferrari respondía a las mil maravillas hasta ese momento. Pero este domingo parece ser que los peores rivales del asturiano fueron los pilotos doblados. Los adelantamientos que sufrió a manos de los McLaren ocurrieron justamente cuando los intentaba pasar. También ahí hay mérito tanto de Hamilton como de Button.

El que sí no se encontró en esta carrera fue Felipe Massa que celebró su renovación por Ferrari de la peor manera posible. Su partida fue pésima y en la primera curva ya había dado todo por perdido por un toque con Liuzzi. El resto fue sólo arrastrarse acabando además con un toque con Michael Shumacher que le provocó su ¡cuarta! entrada a boxes. Por cierto, después de su desastrosa tanda de clasificaciones, el alemán se vio muy nervioso durante las 70 vueltas del gran premio, pese a que su partida fue extraordinaria logrando ganar hasta cinco puestos.

Después de esta breve pero siempre emocionante incursión en Norteamérica (Montreal es uno de mis circuitos favoritos), la F1 vuelve a cruzar el charco para llegar hasta la costa de Valencia. ¿Elegirá Alonso esta ciudad para atacar el dominio de McLaren en las dos últimas carreras? Parece que el equipo británico ha encontrado la solución para enfrentarse a los Red Bull y eso le ha permitido instalarse no sólo en los dos primeros lugares del mundial de pilotos (Hamilton 109 puntos - Button 106) sino también en el de Constructores (215 puntos). Y ojo que ya estamos casi en la mitad de la temporada.

*Puede comentar esta columna en el blog "Arráncalo, por Dios!"

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