Lo ha dicho Rodríguez Zapatero: Mayor Oreja debería abandonar el departamento que dirige porque el tiempo que dedica a ser candidato a lehendakari “le quita mucha capacidad para dar respuesta a los problemas de seguridad ciudadana”. ¿No es eso llevar la cuestión antiterrorista al debate político? ¿No es eso lo que hace el PNV? ¿Se suma el PSOE así al acoso contra Mayor Oreja, hasta ahora exclusiva diana del PNV? No hay duda, estamos en precampaña y la candidatura de Mayor Oreja duele.
También ha dicho Rodriguez Zapatero: “En la perspectiva de cimentación del diálogo, el Gobierno se equivoca y espero la rectificación de Aznar”. Y con ello, lo ha dicho todo. ¿Es que basan la colaboración antiterrorista, ese pacto en cuestiones de Estado del que tanto han presumido, en la mera firma de un documento? Ya les avisaron hace tiempo, cuando anunciaron el borrador, que no aportaba nada. Pero insistieron en presentarlo.
Además, ha dicho el locuaz Caldera, aspirante a azote del Gobierno, que es un grave error la actitud del Gobierno al intentar “apropiarse en exclusiva de la lucha contra ETA”. ¿Albergan alguna duda sobre sus actos y su colaboración con el Ejecutivo frente al terrorismo como para pensar que son inapreciables para la sociedad o, mejor dicho, para el electorado?
Son muchas las preguntas que hay que hacerse cuando se oyen las palabras de los líderes socialistas que, o juegan al despiste o, más bien, juegan a lo suyo. Pero con algo tan serio como el terrorismo no se pueden crear públicas polémicas que dan cancha a quien, según se dice, no se le quiere dar.
Y más preguntas. ¿Van a pactar con el PNV tras las elecciones? Zapatero contesta: No con estos líderes, pero nunca quiero cerrar una puerta.
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