Menú
Víctor Cheretski

Dudosas recomendaciones

Con gran sorpresa nos hemos enterado de que las Cámaras de Comercio apuestan desde ahora por la Europa del Este como principal zona de inversión para los empresarios españoles. Nos sorprende especialmente que entre los países recomendados para estas inversiones figuren no sólo los próximos socios de la UE, como Hungría, República Checa y Polonia, sino también Rusia y otros países de la antigua URSS. Hasta nos ha parecido un disparate de mal gusto cuando hemos leído que la expansión hacia el Este se ve por el Comité Ejécutivo de las Cámaras como una alternativa al fracaso inversionista en Argentina. Y todo esto bajo el pretexto de no perder competitividad mundial. Así que, señores ¡iremos desde ahora, viento en popa, de Málaga a Malagón, de Guatemala a Guatepeor!

Y es que, como siempre, a nadie se le ocurre avisar: ¡Ojo! La mayoría de los países del Este es una zona de riesgo mucho más peligrosa que Argentina. Al parecer, nadie se acuerda ya del default ruso de agosto de 1998 que tuvo consecuencias mucho peores que la crisis argentina. En aquel entonces salieron pitando de Rusia miles de inversores extranjeros, entre ellos españoles, completamente arruinados por las decisiones draconianas del gobierno ruso. En Rusia, en Ucrania, en Bielorrusia, en Rumanía, en Bulgaria o en otros países de la antigua órbita comunista no existe hasta ahora transparencia en la economía y las finanzas. Las sorpresas desagradables pueden surgir a cada paso.
Pensamos que, antes de invitar al empresario español a invertir en aquella zona, las Cámaras de Comercio deberían crear un fondo especial para rescatar a los empresarios que seguirán sus recomentdaciones de las garras de las bandas criminales que proliferan en ciertos países del Este. ¡Qué memoria tan corta tenemos! Ya ni nos acordamos de los dos desgraciados que se atrevieron a hacer negocios en Georgia y se pasaron un año atados por el cuello en las perreras chechenas, mientras sus allegados intentaban recaudar el rescate vendiendo bienes familiares.

¿Saben algo los altos cargos de las Cámaras de las mafias del Este, de la burocracia estalinista, de la corrupción que mantiene entre la espada y la pared a cualquier empresario extranjero que se atreva a penetrar en aquel mundo? ¿Saben de los trámites que necesita pasar cualquiera que pretenda operar, por ejemplo, en Rusia? El camino se abre sólo pagando, a cada paso y a todo el mundo —a los funcionarios y a los mafiosos que controlan el 100% de la economia nacional.

En Moscú son necesarios esfuerzos titánicos para conseguir cualquier licencia o papel oficial. Los socios locales nunca son de fiar y, como norma, suelen desaparecer a la hora de pagar sus deudas. Allí existe una policía que puede detener y meter en la cárcel por cualquier pretexto, como acusar de una infracción de las normas de tráfico o de espionaje. Le da igual, lo que le importa es que sueltes dinero y le pagues cuanto más mejor. Hay también graves problemas en la vida cotidiana y una carestía que no soporta el presupuesto de ninguna empresa.

Así que no se perfilan muchas perspectivas para la inversión en el Este, por mucho que lo deseen las Cámaras de Comercio. En cuanto a los pocos países de la zona más o menos estables, especialmente los próximos miembros de la UE, en su territorio ya compiten otros socios europeos, y no será nada fácil buscarse un hueco en sus mercados.

© www.libertaddigital.com 2001
Todos los derechos reservados

Titulares de Libertad Digital
Suscríbase ahora para recibir nuestros titulares cómodamente cada mañana en su correo electrónico. Le contamos lo que necesita saber para estar al día.

  
!-->

En Libre Mercado

    0
    comentarios