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EDITORIAL

Cuando el delito sale gratis

este caso ha venido a confirmar que, en España, delinquir no es que salga barato, es que puede llegar a salir gratis

Los que aseguran que el sistema judicial es una puerta giratoria para los delincuentes tenían esta semana un nuevo argumento a su favor. El caso de los atracadores de banco pillados in fraganti por la policía y liberados por la juez al no solicitar el fiscal prisión preventiva, no ha hecho más que enredarse según pasaban los días. Como las imágenes dieron la vuelta a todas las televisiones del país y sobrevino la justificada indignación ciudadana, el Fiscal General del Estado, el inefable Conde Pumpido, ha puesto toda la carne en el asador para, tarde y mal, hacer algo de justicia. Días después de la primera vista los delincuentes eran detenidos de nuevo en Vigo.

Con la criminalidad en alza y figurando entre uno de los principales temas de preocupación de los españoles, este caso ha venido a confirmar que, en España, delinquir no es que salga barato, es que puede llegar a salir gratis. Esta vez, por fortuna, la policía estaba esperando con la cámara de vídeo encendida y los atracadores han sido arrestados tras un rocambolesco culebrón judicial.

Según parece, la policía siempre graba sus actuaciones, o casi, porque cuando fueron a detener a los terroristas del 11-M en Leganés no registraron ni un solo minuto. Desconocemos la razón pero nos gustaría saberla.

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