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GEES

Good to see you... depende...

En Europa no somos nadie. Hicimos oídos sordos a las recomendaciones sobre la política de inmigración adoptada alegremente y hemos dado la espalda a nuestros socios en la cuestión de Cuba.

Da cierto reparo ver como Zapatero anda por los pasillos de la ONU para hacerse el encontradizo con Bush, quien por toda respuesta le espeta un "me alegro de verte", ajustándose a los más elementales principios de la diplomacia. Eso es lo que nos queda, la diplomacia, porque todo lo demás lo hemos perdido por el tortuoso camino de esta legislatura que parece no tener fin.

Con la reciente noticia de los dos soldados muertos en Afganistán y el último atentado de ETA, parece claro que España hace aguas por la inconsciencia de un presidente del Gobierno cuyo logro principal es el de descuartizar el Estado desde sus raíces.

Comenzó retirando las tropas de Irak a las bravas, mientras trataba de engañar a los ciudadanos sobre la misión de paz que se supone desempeñan nuestros soldados en Afganistán. Pero la luz del sol no se puede tapar con un dedo. Al final, las cosas se saben. Defender la cuestión de Irak quita votos a ZP, y Afganistán no. Así de claro.

Nuestra España es la de los estatutos asimétricos e interesados, las conversaciones con ETA, el desprecio a la bandera y el ataque a la Corona. Es la de las OPAs ilegales, la de la negación del agua al vecino, la de la ofensa subvencionada, no solo a los católicos, sino a los principios de la estética. La España de Zapatero es campeona en fracaso escolar, que se quiere enmendar bajo los parámetros del pensamiento único de la Educación para la ciudadanía.

En Europa no somos nadie. Hicimos oídos sordos a las recomendaciones sobre la política de inmigración adoptada alegremente y hemos dado la espalda a nuestros socios en la cuestión de Cuba. Los únicos amigos que tenemos en el exterior ya sabemos quienes son, los "retropopulistas".

A unos pocos meses de las elecciones, Zapatero saca la chequera a la desesperada, dispuesto a pagarnos la casa, los dientes y, en cualquier momento, hasta unas vacaciones en el Caribe con tal de que le votemos, desestimando las sensatas recomendaciones de que no dilapidemos las arcas del Estado por si vienen tiempos malos. Unas arcas que se encontró repletas, por mucho que Solbes quiera negarlo. Y él lo sabe mejor que nadie.

"Good to see you?"... depende. Ya ha demostrado cuan pernicioso puede llegar a ser tenerlo otros cuatro años al frente de España. Porque se llamará España, ¿no?

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