Cuando empecé en esto del articulismo el primer consejo que recibí, aparte de que no me metiera con la Corona ni con El Corte Inglés, fue: "No te consideres un creador". Lo de ser un creador, pues, debía ser una cosa muy desaconsejable, y ahora veo por qué: alguien dijo que lo más parecido a un gángster es un sindicalista, pero yo me creo que los creadores se van pareciendo todavía más, a juzgar por las últimas declaraciones de éstos: "Si el PP está contra el canon, los creadores tomaremos buena nota." ¿Ah, pero no la habían tomado ya, la buena nota?
Porque me parece recordar que fueron estos mismos creadores los que gritaron justo antes de unas elecciones que había motivo para echar del poder a quienes no sólo les habían aprobado cánones, sino canonjías. No perdonaron el favor. Nunca se perdona el favor del enemigo. Fueron cuatrocientas personas a apoyar en los cines de toda España lo del "motivo". Ante la gran sensación de público, se sacó la correspondiente y necesaria edición en DVD con extras. Con algún motivo que todavía no se sabe. Un DVD altruista y revolucionario que costaba en España el doble de lo que cualquier clásico del séptimo arte en los Estados Unidos. ¿No habíamos quedado en que las copias privadas estaban matando de todas las matazones al cine, hundiendo supuestamente el mercado estatal del DVD? Cuatrocientas personas de cuarenta y cinco millones no pueden estar equivocadas: si no llega a ser por ellas, una peli tan imprescindible como Hay motivo no hubiese conocido su DVD oficial y las masas enfebrecidas hubiesen debido adquirirla en el top manta. ¡Si es que se está hundiendo el mercado!
Los de Hay motivo, en cine y DVD, los del mitin vietnamita durante los premios Goya, los de la pancarta frente al Congreso de los Diputados, los creadores hiperlegitimados contra a la "democracia formal" del PP, dicen ahora que "tomarán buena nota" de la oposición de este partido a que se robe a los ciudadanos de forma preventiva. No tenemos ninguna esperanza de que el PP tome nota de que le están tomando buena nota. ¿Pero en qué desembocarán esas inquietantes notas de la SGAE, de los sumos hacedores? Si la vez anterior los saltimbanquis y cristobitas empezaron con los fuegos artificiales que meses después acabaron con el trueno gordo de los trenes de cercanías, imaginamos que esta vez el PP no se va a santiguar a menos que los que ahora toman buena nota con ellos empiecen a hacer pijamas de cemento armado a diestra y a diestra.
Pero tomemos nota nosotros. Así han hablado los creadores. Como diría Vito Corleone, somos muy supersticiosos, y si un rayo nos fulminara por casualidad acusaríamos a algunos de los presentes. Estos creadores son capaces de cualquier cosa.
