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Amando de Miguel

La curiosa significación de algunas palabras

Apuesto a que matrona se transformará en técnico de Alumbramientos y enfermera en técnico de Salud.

Hernán Osorno Giraldo quiere saber cómo se designa al padre del tatarabuelo. Muy fácil, aunque hay varias versiones. Esta creo que es la más sencilla:

Ego es el... de su... Generación
Hijo Padre 1
Nieto Abuelo 2
Biznieto Bisabuelo 3
Tataranieto Tatarabuelo 4
Chozno Pentabuelo 5
Bichozno Hexabuelo 6
Trichozno Heptabuelo 7

Se podría continuar, pero no está mal dibujar el árbol genealógico hasta la séptima generación (más de dos siglos).

Benjamín Bardiales Fraga se plantea la cuestión de cómo llamar a las matronas (oficio tradicionalmente femenino) que son varones. Don Benjamín propone que sea un término común tanto para mujeres como para varones. Añado que algo parecido se plantea con enfermera, azafata y quizá alguna otra profesión típicamente femenina. Por lo mismo que "la persona" acoge tanto a mujeres como a varones, no veo por qué "la enfermera" no puede seguir el mismo principio. No me repugna que se pueda decir "la matrona" o "la enfermera". Es igual; no nos harán caso, don Benjamín. Apuesto a que matrona se transformará en técnico de Alumbramientos y enfermera en técnico de Salud.

Cándido Alvarado Muñoz (San Pedro Sulas, Honduras) se pregunta cuál es la diferencia entre sentido común y lógica. Me parece que son intercambiables, pues esa lógica, en la acepción corriente, se refiere a la coherencia y sensatez en la forma de razonar. Quien tiene esa cualidad se puede decir que despliega sentido común. Quizá pueda decirse que el sentido común se aplica al individuo que lo posee, mientras que la lógica se predice de un razonamiento.

Sobre el famoso concurso para encontrar la palabra que mejor describa a la persona pesada, Illya Kuryakín me recuerda la aportación de Jardiel Poncela: "el amigo-póliza porque se pega como un sello y no vale más que dos pesetas". Es una lástima que ya no haya pólizas ni pesetas, ni tampoco papel de barba.

Pedro David González se pregunta, si la palabra machista significa "actitud de prepotencia de los varones respecto a las mujeres", ¿cómo designamos la actitud de prepotencia de las mujeres respecto a los varones? La duda es pertinente, pues esa última realidad carece de palabra. Precisamente esa ausencia indica que se halla muy extendida la actitud de prepotencia de las mujeres respecto a los varones. Habría que etiquetar esa actitud como hembrismo, mujerismo o feminismo. Esa última palabra ya existe, por lo que bastaría darle una nueva acepción.

Pedro Manuel Araúz Cimarra (Manzanares de la Mancha, Ciudad Real) se queja de algunos usos malsonantes, como entreno (en lugar de entrenamiento) o pescatera (en lugar de pescadera). Comparto el horror que me produce el sustantivo entreno. No menor rechazo me produce el verbo entrenar (en lugar de "entrenarse") cuando se refiere al sujeto. Lo de pescatera es un vulgarismo muy salado. Don Pedro Manuel opina que deberíamos decir carnecería, pues se deriva de carne. En efecto, en algunos lugares de España se dice así, pero ha cuajado más lo de carnicería, por lo mismo que decimos productos cárnicos y carnívoro. El origen está en el latín caro-carnis (= carne), aplicado a la de los animales, al cuerpo humano y a la fruta.

Otra crítica de don Pedro Manuel: la pasada "huelga" de los camioneros mejor sería decir que ha sido un "cierre patronal". Opino que ni una cosa ni la otra. No ha sido propiamente una huelga porque no la han desplegado los trabajadores por cuenta ajena contra sus patronos. Pero tampoco se puede considerar como un cierre patronal porque no ha sido contra los trabajadores. La prueba es que los sindicatos no han dicho ni mu. Se trata de una nueva figura –ya generalizada– por la que protestan los empresarios y trabajadores al unísono contra el Gobierno. Se parece más bien a la figura de los grupos de presión, los que tratan de conseguir privilegios o un trato de favor del Gobierno. Para ello este tipo de "movilizaciones" tratan de molestar al público con tácticas que más parecen boicoteo o sabotaje. De ahí esa maravilla léxica que son los "piquetes informativos", una forma de violencia ilegítima y prácticamente impune.

Jon Lizarrirbar afirma que "en Euskera, y especialmente en la variante vizcaína, el vocablo korta es de uso corriente y significa exactamente establo o cuadra". Esa voz se encuentra en apellidos como Kortabarría (= establo nuevo) o Kortazar (= establo viejo). Añado que también se dice gorta en vascuence para la cuadra o el ejido. Recordemos que corte es también "establo" en portugués. Ahora está clara la extensión a toda la Península de las cortes, cortijos y cortinas como derivación del latín.

Recordarán los amables libertarios la polémica menuda sobre si tete es el nombre con que los niños llaman al "ombligo" en Segovia o bien esa voz se da asimismo fuera de esa provincia. Daniel Gutiérrez Martínez certifica que en Burgos también se dice así. Su padre es soriano y su madre bilbaína. Agustín Fuentes aporta el recuerdo de ese nombre de tete para el ombligo en su ciudad de nación, Valladolid. Antonio Fabregues Quevedo añade que en Cataluña tete es un hipocorístico (recuérdese el genial Tete Montoliu). En su familia tete es el "chupete", según dicen los niños. Por cierto, don Antonio está interesado en saber por qué los niños en Cataluña llaman chache al hermano mayor. Para mí es otro ejemplo de las sílabas fáciles del hablar infantil, un rasgo común a varias lenguas. Chache parece castellano, emparentado con chaval, muchacho, chacho, chacha, chamaco, chapulín, chavo o chango (muchacho en varios países americanos). Mocho es la persona con el pelo rapado; de ahí mozo. Puede que el che de los valencianos a los rioplatenses tenga algo que ver con esa familia de vocablos.

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