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Zapatero pide al PP que "demuestre" que el PSOE apoya actos violentos en las manifestaciones

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ha desmentido que su partido agite o apoye los actos violentos que están teniendo lugar al término de las manifestaciones en contra de la guerra en Irak y se dirigió al secretario general del PP, Javier Arenas, para exigirle que "demuestre" esas acusaciones.

L D (EFE) En declaraciones a la Cadena Ser, Zapatero ha dicho que "no estamos dispuestos a dejar pasar ni una acusación de esta naturaleza, porque son falsas, injustas, mentiras, y además el Gobierno sabe que miente cuando dice que el PSOE tiene un silencio, o instiga o está complaciente" con esos actos violentos. Zapatero hizo esta reflexión como consecuencia de las acusaciones lanzadas este fin de semana por el secretario general del PP, Javier Arenas, quien dijo que algunos concejales del PSOE habían protagonizado incidentes y le pidió al líder socialista que condenara estos hechos y otros protagonizados por violentos. En el mismo sentido también hablaron los ministros Mariano Rajoy y Ángel Acebes, que pidieron a Zapatero que deje de apoyar a las “minorías violentas” que se sirven del “No a la guerra” para provocar incidentes. Ante estas acusaciones, Zapatero ha declarado: "Yo sería incapaz, no ya sólo de decir eso públicamente, nunca, del PP, sino ni siquiera de pensarlo".

Asimismo, el secretario general del PSOE ha dicho que su partido presentaría una moción de censura contra el presidente del Gobierno "si existiera la más mínima posibilidad" de que "sirviera para cambiar un poco" la "actitud" del Ejecutivo y "contribuir algo al fin" de la guerra. Zapatero insistió en que "si tuviera la más mínima convicción" de que esa iniciativa sirviera para parar "esta barbarie, esta guerra absurda, injusta e innecesaria", entonces "habría moción de censura", aunque recordó que la moción de censura es "constructiva" y "exige la mayoría absoluta". "Creo que la inflexibilidad absoluta de Aznar, día a día, hace que ese horizonte sea difícil de barruntar", admitió, al igual que el hecho de que el presidente del Gobierno "esté dispuesto a asumir una responsabilidad, que tiene, muy grave". Insistió en que el objetivo de su partido es "intentar parar la guerra" y en que "es el PSOE como alternativa quien tiene que liderar las consecuencias políticas" y se mostró convencido de que "lo vamos a hacer".

Destacó que España "está apoyando políticamente una guerra y ha decidido enviar tropas a la zona del conflicto que, desde luego, no pueden ser consideradas como en misión humanitaria" porque eso sólo sería posible "si fuéramos un país políticamente neutral" por lo que añadió que "deberían regresar cuanto antes". Señaló que el Gobierno "tiene la facultad con el Acuerdo existente con Estados Unidos" para permitir "un uso determinado de las bases" y que el uso que se está realizando "no debería estar autorizado" porque "no entra dentro del marco del Convenio" bilateral. Estimó que "es falso cuando el Gobierno dice que está cumpliendo estrictamente" el Convenio porque "no hay un problema de defensa bilateral", ni una "obligación multilateral" respaldada por Naciones Unidas o la OTAN "que haya decidido apoyar lo que en realidad estamos viendo, que es una invasión de un país por parte de Estados Unidos y de Inglaterra".

Se refirió a la oferta de consenso realizada por el presidente del Gobierno, José María Aznar, y afirmó que "no me ofreció un consenso, sino la posibilidad de tener información de acontecimientos que se iban a producir" por lo que "no hubo posibilidad" de acuerdo.

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