L D (EFE) La Audiencia, en un auto al que ha tenido acceso EFE, anula la concesión del régimen, que permitía a De la Rosa salir de la cárcel de lunes a viernes durante 12 horas diarias. El auto indica que la concesión del régimen especial debe ir acompañada de un programa específico de tratamiento de rehabilitación penitenciaria y en este caso no se ha justificado. Además, los jueces de la Audiencia dicen que se tenían que haber tenido en cuenta otros factores como la clasificación inicial del interno, que está en segundo grado. Explican que lo que ha hecho la Generalitat es establecer "una situación equivalente al tercer grado", un tercer grado que ya había sido concedido a De la Rosa por el gobierno catalán, pero que el juez de vigilancia penitenciaria también revocó.
La sala también recuerda "como dato a valorar" que De la Rosa tiene todavía varias causas judiciales pendientes. Por su parte, los abogados defensores del financiero catalán solicitaron que se confirmase este régimen especial que disfrutaba el preso alegando que en sus horas libres fuera de la cárcel iba a colaborar con la parroquia de San Odón de Barcelona. Pero el tribunal remarca que "no se ha hecho referencia alguna ni a horarios ni a control de los mismos ni lo que es más importante en qué consiste tal colaboración".
Los defensores también alegaron que De la Rosa iba a desarrollar fuera de la prisión tareas de asesoramiento de empresas en el bufete de abogados del que es titular "actividad en la que precisamente se desarrolló la actividad delictiva por la que Javier de la Rosa cumple condena". La fiscalía recurrió el régimen carcelario especial concedido por la Generalitat el 9 de abril a Javier de la Rosa al considerar que "no ha hecho nada en absoluto" para merecerlo y era "un regalo" y pidió a la Audiencia de Barcelona que lo devolviera a prisión como cualquier preso ordinario.
De la Rosa, de acuerdo con el beneficio que le había concedido la Generalitat, salía cada día de la prisión durante 12 horas, cuatro más de las que dispondría con el tercer grado, y los fines de semana los pasaba en la cárcel. La Generalitat justificó la concesión de este régimen especial al empresario para permitirle "trabajar". La situación penitenciaria del financiero ha sido motivo de polémica en más de una ocasión puesto que la Generalitat le concedió directamente el tercer grado a los 22 días de ingresar en prisión, el pasado 23 de noviembre, para cumplir su primera condena, de 1 año y 8 meses, por el citado intento de estafa a KIO.
La sala también recuerda "como dato a valorar" que De la Rosa tiene todavía varias causas judiciales pendientes. Por su parte, los abogados defensores del financiero catalán solicitaron que se confirmase este régimen especial que disfrutaba el preso alegando que en sus horas libres fuera de la cárcel iba a colaborar con la parroquia de San Odón de Barcelona. Pero el tribunal remarca que "no se ha hecho referencia alguna ni a horarios ni a control de los mismos ni lo que es más importante en qué consiste tal colaboración".
Los defensores también alegaron que De la Rosa iba a desarrollar fuera de la prisión tareas de asesoramiento de empresas en el bufete de abogados del que es titular "actividad en la que precisamente se desarrolló la actividad delictiva por la que Javier de la Rosa cumple condena". La fiscalía recurrió el régimen carcelario especial concedido por la Generalitat el 9 de abril a Javier de la Rosa al considerar que "no ha hecho nada en absoluto" para merecerlo y era "un regalo" y pidió a la Audiencia de Barcelona que lo devolviera a prisión como cualquier preso ordinario.
De la Rosa, de acuerdo con el beneficio que le había concedido la Generalitat, salía cada día de la prisión durante 12 horas, cuatro más de las que dispondría con el tercer grado, y los fines de semana los pasaba en la cárcel. La Generalitat justificó la concesión de este régimen especial al empresario para permitirle "trabajar". La situación penitenciaria del financiero ha sido motivo de polémica en más de una ocasión puesto que la Generalitat le concedió directamente el tercer grado a los 22 días de ingresar en prisión, el pasado 23 de noviembre, para cumplir su primera condena, de 1 año y 8 meses, por el citado intento de estafa a KIO.