L D (EFE) Estas son las cifras que ha aportado el presidente del grupo. Emilio Botín, en su intervención ante la Junta General Ordinaria de Accionistas, se mostró satisfecho con la evolución del negocio en lo que va de ejercicio y después de que el año pasado el banco tuviera que afrontar una disminución del 9,8 por ciento en sus ganancias. Esta positiva previsión se debe en buena parta a Argentina, que según dijo Botín, ha comenzado a recuperarse de su “profunda crisis y la nueva Administración ha manifestado su voluntad de abordar los graves problemas estructurales que dificultan la senda del crecimiento sostenido”.
Respecto a Brasil, donde el SCH es propietario de Banespa, señaló que, “tras las acertadas medidas adoptadas por la nueva Administración, ha mostrado una evolución muy positiva de sus principales indicadores”, proceso que, a su juicio, continuará.
Previamente al presidente ha intervenido el vicepresidente y consejero delegado del SCH, Alfredo Sáenz, que confió en que el 2003 sea el “punto de inflexión” que permita al banco retomar la senda de crecimiento rentable y de generación de valor que ha mantenido la entidad en los últimos años.
Sáenz insistió en que el banco cuenta con “una capacidad de crecimiento superior a la de nuestros competidores internacionales”, gracias a una posición competitiva “inmejorable”. El banco, añadió, cuenta con “la mejor base de clientes en la Península Ibérica y en los mercados más atractivos de Iberoamérica”, donde la recuperación comienza a notarse con una mayor afluencia de capitales.
El vicepresidente y consejero delegado explicó que aunque los resultados del primer trimestre del 2003 están por debajo de los obtenidos en el 2002, se aprecia una buena evolución de las comisiones, una mejora en los resultados por operaciones financieras, se mantiene el control de los gastos y, además, los esfuerzos en saneamientos no tendrán que ser tan intensos “tras los esfuerzos realizados en años anteriores”.
Estas circunstancias han permitido que el beneficio del primer trimestre del 2003 haya crecido un 16 por ciento más que los últimos trimestres del 2002, una tendencia que, a su juicio, se mantendrá hasta finales de año.
Respecto a Brasil, donde el SCH es propietario de Banespa, señaló que, “tras las acertadas medidas adoptadas por la nueva Administración, ha mostrado una evolución muy positiva de sus principales indicadores”, proceso que, a su juicio, continuará.
Previamente al presidente ha intervenido el vicepresidente y consejero delegado del SCH, Alfredo Sáenz, que confió en que el 2003 sea el “punto de inflexión” que permita al banco retomar la senda de crecimiento rentable y de generación de valor que ha mantenido la entidad en los últimos años.
Sáenz insistió en que el banco cuenta con “una capacidad de crecimiento superior a la de nuestros competidores internacionales”, gracias a una posición competitiva “inmejorable”. El banco, añadió, cuenta con “la mejor base de clientes en la Península Ibérica y en los mercados más atractivos de Iberoamérica”, donde la recuperación comienza a notarse con una mayor afluencia de capitales.
El vicepresidente y consejero delegado explicó que aunque los resultados del primer trimestre del 2003 están por debajo de los obtenidos en el 2002, se aprecia una buena evolución de las comisiones, una mejora en los resultados por operaciones financieras, se mantiene el control de los gastos y, además, los esfuerzos en saneamientos no tendrán que ser tan intensos “tras los esfuerzos realizados en años anteriores”.
Estas circunstancias han permitido que el beneficio del primer trimestre del 2003 haya crecido un 16 por ciento más que los últimos trimestres del 2002, una tendencia que, a su juicio, se mantendrá hasta finales de año.