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Ausencias y presencias significativas de la vieja guardia socialista

Aznar ya expresó en el cara a cara con Zapatero que dudaba que el secretario general del PSOE fuera el candidato del partido para las elecciones generales de 2004. Desde el PP, la ausencia de González y la presencia de los guerristas en el Congreso demuestran que ha comenzado la “caza y captura” de Zapatero.

L D (EFE) Los populares creen que “en las filas socialistas han comenzado a darle el finiquito a Zapatero”. Así se ha expresado el diputado Ignacio Gil Lázaro tras comprobar los “gestos y ausencias” del PSOE durante el debate sobre el estado de la nación, que apuntan a un despertar de “los viejos cuchillos internos”.

Para el portavoz adjunto del PP, durante la primera jornada del debate quedó “suficientemente acreditado” que en las filas del PSOE “se ha abierto la caza y captura” de su secretario general por “su incapacidad, falta de coherencia, ausencia de equipo, incompetencia para generar alternativas y proyectos, y por el espectáculo creado en Madrid”. Gil Lázaro no ha pasado por alto un “gesto”: la “significativa ausencia de Felipe González, protector de Zapatero” en el hemiciclo. Aunque el ex presidente del Gobierno lidera el ranking de absentismo parlamentario y sus reiteradas ausencias ya no son noticia, los populares sostienen que “en un momento en el que le está lloviendo (a Zapatero) externa e internamente todo lo que le cae, su ausencia acredita que le ha retirado esa protección”.

Un pluriempleado Felipe González optó por su otro trabajo: dar conferencias, y pronunció una titulada "La conformación de la España actual" durante un acto de la Fundación Rafael del Pino. "Pasará tiempo, pero cuando pase tiempo el periodo de Gobierno más limpio de la historia de España lo habré presidido yo", esta fue una de las frases que regaló a su auditorio.

Si significativa fue la ausencia de González, no menos lo fue la presencia de Alfonso Guerra “y sus diputados más próximos, que permanecieron impasibles sentados en sus escaños cuando Zapatero terminó su intervención”. “Todo eso, sumado a la escasa capacidad de entusiasmo que despertó entre sus propias filas, hace pensar que se ha abierto ya la veda interna” contra Zapatero, sostiene el diputado popular, que critica al líder socialista por “construir un discurso sobre la base de cuatro chascarrillos y tres recortes de periódico”.

"Todo ese cúmulo de gestos” indican que “la vieja guardia ha abierto la veda interna a Zapatero”, algo que “probablemente comparten la inmensa mayoría de los militantes y responsables socialistas”, dice Gil Lázaro.

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