L D (EFE) Desde su gira centroamericana, Aznar ha “garantizado” que “no va a haber ningún elemento de bicefalia en el Partido Popular”. Con este comentario salía al paso de las interpretaciones que se dispararon después de que la nueva responsable de Organización del PP explicará que no está previsto celebrar el Congreso del partido hasta dentro de dos años. Estas manifestaciones se entendieron como la confirmación de que Aznar seguiría presidiendo el PP hasta esa fecha, enero de 2005.
Ni presidirá el Gobierno ni el partido
Horas después, y durante una conferencia de prensa tras asistir a una cumbre de presidentes centroamericanos en San Salvador, Aznar negó toda posibilidad de bicefalia en el partido, dijo que habrá “tiempo” para ver que esa situación no se produce. “Lo que yo he garantizado siempre y vuelvo a garantizar ahora es que no va a haber ningún elemento de bicefalia en el Partido Popular, y ya tendrá usted tiempo de verlo”, dijo Aznar al ser preguntado sobre su continuidad en la presidencia del PP una vez que se designe candidato del PP a la presidencia del Gobierno.
Aznar recordó que ya dijo que él no va a ser candidato a las próximas elecciones, y que en el año 2002 también aseguró “que no volvería a ser candidato a la presidencia de mi partido”. En este sentido, apuntó que el PP “celebra congresos cada tres años, y por tanto en el año 2005 yo no volveré a ser candidato a la presidencia del PP”. Pero también insinuó que su despedida puede llegar antes de esa cita, en un Congreso extraordinario, con el objetivo de garantizar que no haya bicefalia. “Esa es la previsión que hay, y luego se pueden tener previsiones extraordinarias, pero las previsiones extraordinarias, por serlo, no son previsiones. Esos son mis dos compromisos y yo los voy a cumplir”, concluyó.
Entre las posibilidades que se barajan está la celebración de un Congreso extraordinario en julio de 2004, sosegada ya la política tras las elecciones generales. Pero también, adelantar esa reunión congresual al otoño, y anunciar entonces la despedida de Aznar y el nombre del sucesor al mismo tiempo.
Arenas, partidario de agotar los tiempos
El secretario general del PP también ha rechazado cualquier posibilidad de bicefalia. En declaraciones a TVE, Javier Arenas explicó que desde el momento en que se designe al sucesor, en septiembre u octubre, asumirá todo el liderazgo del partido. El ministro de Administraciones Públicas ha insinuado que desde entonces hasta la celebración del Congreso, en enero de 2005, Aznar pasará a un segundo plano dentro del partido.
El PP, dijo Arenas, irá a las elecciones generales con un presidente del Gobierno "cumpliendo el mandato de los españoles hasta el mes de marzo", y un líder que es el candidato a la Presidencia del Gobierno. "Toda la atención política en la búsqueda de la confianza de los ciudadanos estará en el candidato a la Presidencia del Gobierno", subrayó el dirigente del PP, quien indicó que hasta marzo José María Aznar "cumplirá con su obligación, dando un ejemplo espectacular de cumplimiento de su palabra".
Ni presidirá el Gobierno ni el partido
Horas después, y durante una conferencia de prensa tras asistir a una cumbre de presidentes centroamericanos en San Salvador, Aznar negó toda posibilidad de bicefalia en el partido, dijo que habrá “tiempo” para ver que esa situación no se produce. “Lo que yo he garantizado siempre y vuelvo a garantizar ahora es que no va a haber ningún elemento de bicefalia en el Partido Popular, y ya tendrá usted tiempo de verlo”, dijo Aznar al ser preguntado sobre su continuidad en la presidencia del PP una vez que se designe candidato del PP a la presidencia del Gobierno.
Aznar recordó que ya dijo que él no va a ser candidato a las próximas elecciones, y que en el año 2002 también aseguró “que no volvería a ser candidato a la presidencia de mi partido”. En este sentido, apuntó que el PP “celebra congresos cada tres años, y por tanto en el año 2005 yo no volveré a ser candidato a la presidencia del PP”. Pero también insinuó que su despedida puede llegar antes de esa cita, en un Congreso extraordinario, con el objetivo de garantizar que no haya bicefalia. “Esa es la previsión que hay, y luego se pueden tener previsiones extraordinarias, pero las previsiones extraordinarias, por serlo, no son previsiones. Esos son mis dos compromisos y yo los voy a cumplir”, concluyó.
Entre las posibilidades que se barajan está la celebración de un Congreso extraordinario en julio de 2004, sosegada ya la política tras las elecciones generales. Pero también, adelantar esa reunión congresual al otoño, y anunciar entonces la despedida de Aznar y el nombre del sucesor al mismo tiempo.
Arenas, partidario de agotar los tiempos
El secretario general del PP también ha rechazado cualquier posibilidad de bicefalia. En declaraciones a TVE, Javier Arenas explicó que desde el momento en que se designe al sucesor, en septiembre u octubre, asumirá todo el liderazgo del partido. El ministro de Administraciones Públicas ha insinuado que desde entonces hasta la celebración del Congreso, en enero de 2005, Aznar pasará a un segundo plano dentro del partido.
El PP, dijo Arenas, irá a las elecciones generales con un presidente del Gobierno "cumpliendo el mandato de los españoles hasta el mes de marzo", y un líder que es el candidato a la Presidencia del Gobierno. "Toda la atención política en la búsqueda de la confianza de los ciudadanos estará en el candidato a la Presidencia del Gobierno", subrayó el dirigente del PP, quien indicó que hasta marzo José María Aznar "cumplirá con su obligación, dando un ejemplo espectacular de cumplimiento de su palabra".