L D (EFE) Ibai Aguinaga Guinea, de 22 años de edad y natural de Berango (Vizcaya), tenía una orden de búsqueda, detención y personación dictada por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional por terrorismo. Desde 1997, Aguinaga, alias "Beltza" (negro), había sido detenido en tres ocasiones por más de una veintena de acciones de terrorismo urbano.
En su historial delictivo destaca su posible participación el 5 de enero de 1999, junto con otros 30 individuos encapuchados, en el lanzamiento de 50 "cócteles molotov" contra el cuartel de la Guardia Civil de Guecho. Además, el 9 de abril de 1999 participó en la colocación de un artefacto de fabricación casera en el domicilio del concejal del PSOE Julio Eugenio Moro López. Un día después, el 10 de abril, colocó otro artefacto explosivo en el domicilio de otro concejal, en esta ocasión del PP, Virgilio Méndez Medrano.
En diciembre de ese año, Aguinaga fue detenido por la Policía, junto con otros cuatro jóvenes, como supuesto miembro de un "grupo Y" de apoyo a ETA, considerado por las fuerzas de seguridad como el más activo de Vizcaya en esa época.
Dos años después, en julio de 2001, la Audiencia Nacional ordenó la busca y captura de Aguinaga al no presentarse en el juicio en el que estaba acusado de construir presuntamente un zulo en Berango (Vizcaya) y ocultar en su interior artefactos incendiarios y material para acciones de apoyo a ETA. La relación de este detenido con el terrorismo urbano demuestra, según el ministro, que ETA "recluta del terrorismo urbano los miembros de sus comandos operativos para cometer los crímenes más graves".
Joseba Segurola, de 24 años de edad y natural de Urretxu (Guipúzcoa), tenía pendiente una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión por colaboración con banda armada. Entre 1998 y 2002 había sido detenido en dos ocasiones por su relación con ETA y, en concreto, en diciembre de 2001 fue arrestado por colaborar con el comando que colocó coches-bomba en los aeropuertos de Madrid y Málaga y en un hotel de Salou (Tarragona), aunque poco después fue puesto en libertad por la Audiencia Nacional.
En su historial delictivo destaca su posible participación el 5 de enero de 1999, junto con otros 30 individuos encapuchados, en el lanzamiento de 50 "cócteles molotov" contra el cuartel de la Guardia Civil de Guecho. Además, el 9 de abril de 1999 participó en la colocación de un artefacto de fabricación casera en el domicilio del concejal del PSOE Julio Eugenio Moro López. Un día después, el 10 de abril, colocó otro artefacto explosivo en el domicilio de otro concejal, en esta ocasión del PP, Virgilio Méndez Medrano.
En diciembre de ese año, Aguinaga fue detenido por la Policía, junto con otros cuatro jóvenes, como supuesto miembro de un "grupo Y" de apoyo a ETA, considerado por las fuerzas de seguridad como el más activo de Vizcaya en esa época.
Dos años después, en julio de 2001, la Audiencia Nacional ordenó la busca y captura de Aguinaga al no presentarse en el juicio en el que estaba acusado de construir presuntamente un zulo en Berango (Vizcaya) y ocultar en su interior artefactos incendiarios y material para acciones de apoyo a ETA. La relación de este detenido con el terrorismo urbano demuestra, según el ministro, que ETA "recluta del terrorismo urbano los miembros de sus comandos operativos para cometer los crímenes más graves".
Joseba Segurola, de 24 años de edad y natural de Urretxu (Guipúzcoa), tenía pendiente una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión por colaboración con banda armada. Entre 1998 y 2002 había sido detenido en dos ocasiones por su relación con ETA y, en concreto, en diciembre de 2001 fue arrestado por colaborar con el comando que colocó coches-bomba en los aeropuertos de Madrid y Málaga y en un hotel de Salou (Tarragona), aunque poco después fue puesto en libertad por la Audiencia Nacional.