L D (EFE) Solbes cree que la financiación de la bajada de impuestos que supondrá el adelanto de la reforma fiscal en Alemania "no es lo bastante valiente" y que está rodeada de "grandes incertidumbres". El Comisario afirma que se alegra de que el Gobierno federal "se esfuerce en mantener el déficit por debajo del 3 por ciento, pero también me parece de lo más importante que Berlín lleve a cabo reformas sociales, pues eso es el fundamento de un mayor crecimiento", dice Solbes al semanario alemán "Focus" en su edición del próximo lunes.
El alud de críticas a la financiación de la rebaja fiscal con un mayor endeudamiento no sólo se ha dejado oír desde la oposición conservadora y liberal, sino también en las propias filas de la coalición roji-verde. Así, la portavoz de asuntos presupuestarios del grupo parlamentario de Los Verdes, Antje Hermenau, recuerda en la misma publicación que "el tope de la medida está en la Constitución. No se pueden asumir más deudas de lo que gastamos en inversiones".
Según ese cálculo, el ministro de Finanzas, el socialdemócrata Hans Eichel, debería ahorrar 5.000 millones de euros más, y eso "podemos conseguirlo si queremos", asegura Hermenau. El primer ministro del estado federado del Sarre, el cristianodemócrata Peter Müller, critica también en "Focus" que "pretender que se puede fomentar el crecimiento con un simple adelanto de un año de la rebaja fiscal es ilusorio".
La última fase de la reforma fiscal rebajará el tipo máximo del impuesto sobre la renta al 42 por ciento y el mínimo al 15 por ciento, en lugar del 48,5 y el 19,9 actuales, respectivamente. La medida supondrá un aumento de la deuda pública de unos 5.000 millones de euros, hasta situarla en los 29.000 millones.
El alud de críticas a la financiación de la rebaja fiscal con un mayor endeudamiento no sólo se ha dejado oír desde la oposición conservadora y liberal, sino también en las propias filas de la coalición roji-verde. Así, la portavoz de asuntos presupuestarios del grupo parlamentario de Los Verdes, Antje Hermenau, recuerda en la misma publicación que "el tope de la medida está en la Constitución. No se pueden asumir más deudas de lo que gastamos en inversiones".
Según ese cálculo, el ministro de Finanzas, el socialdemócrata Hans Eichel, debería ahorrar 5.000 millones de euros más, y eso "podemos conseguirlo si queremos", asegura Hermenau. El primer ministro del estado federado del Sarre, el cristianodemócrata Peter Müller, critica también en "Focus" que "pretender que se puede fomentar el crecimiento con un simple adelanto de un año de la rebaja fiscal es ilusorio".
La última fase de la reforma fiscal rebajará el tipo máximo del impuesto sobre la renta al 42 por ciento y el mínimo al 15 por ciento, en lugar del 48,5 y el 19,9 actuales, respectivamente. La medida supondrá un aumento de la deuda pública de unos 5.000 millones de euros, hasta situarla en los 29.000 millones.