L D (Agencias) Ruth Porta, la “mano derecha” de Rafael Simancas, compareció el jueves 31 de julio ante la Comisión de Investigación de la Asamblea de Madrid. Cuando Pedro Muñoz Abrines, portavoz del PP en dicha Comisión, le preguntaba sobre su marido, Enrique Benedicto Mamblona, ella siempre eludía responder y remitía al portavoz popular a la comparecencia de su marido, iniciada este miércoles y que continuará el jueves por la mañana. Frente a la dureza política Ruth Porta, Mamblona se ha presentado ante la Comisión como un hombre sereno, de bajo perfil político, que no suele "trabajar sin estudiar antes la documentación", según explicó, y que rehuye de cualquier estridencia. Ha empezado su declaración respondiendo a las preguntas del portavoz de Izquierda Unida, Luis Suárez, y ha hablado de las noticias que le atribuyen intereses inmobiliarios confrontados con los intereses de los “Renovadores por la base”, la corriente interna dirigida por José Luis Balbás en la Federación Socialista Madrileña.
Según ha dicho, esos argumentos que le "vinculan a la trama urbanística en el PSOE" son “ridículos”, porque la Fundación Hogar del Empleado (FUHEM) accedió, de forma directa o indirecta, a dos solares urbanos para la construcción de viviendas. Uno de ellos fue en Colmenar Viejo, adjudicado por el Ayuntamiento, gobernado por el PP, y el otro adjudicado por el Consorcio Urbanístico Parla-Este, presidido entonces por el actual portavoz del Grupo Popular de la Asamblea, Luis Eduardo Cortés, y participado en un 55 por ciento por la Comunidad, gobernada también por el PP. Además, Benedicto detalló su actividad profesional para defender su "honorabilidad" que, según afirmó, ha puesto en entredicho el diputado tránsfuga Eduardo Tamayo al atribuirle supuestos intereses inmobiliarios para justificar su deserción. En este contexto, Mamblona acusó a Tamayo de "inventarse la historia de un enfrentamiento con él", atribuyéndole una serie de "supuestos intereses inmobiliarios" que "jamás he tenido" para justificar su espantada de la Asamblea de Madrid.
Niega tener "negocios" y se define como asesor
De esta manera, argumentó que los llamados "negocios del marido de Ruth Porta" se limitan a no tener responsabilidad alguna en la gestión de las sociedades en las que participa la Fundación y aseguró que ni tiene voto para elegir a los responsables de la administración de las mismas, ni es administrador de ninguna de ellas, ni posee participación accionarial, ni pertenece al patronato. Igualmente, señaló que su patrimonio es "absolutamente discreto" puesto que se reduce, aseguró, a la mitad de su casa, un coche y 4.408 euros de inversión financiera. Además de su dedicación a la Fundación, su actividad profesional, según resumió, se ha centrado en el asesoramiento municipal, la gestión de organismos y empresas públicas, empresas de economía social o empresas privadas en crisis, entre otras tareas.
En concreto, mencionó los trabajos realizados entre 1994 y 1996 para dos empresas públicas -como director financiero en Arpegio y como director general en Informática Comunidad de Madrid (ICM)- y destacó entre sus cometidos el diseño del plan financiero para la construcción de las nuevas líneas de Metro "que desarrolló posteriormente el Gobierno de Ruiz-Gallardón". En su intervención se refirió de forma extensa a la actividad de la Fundación Hogar del Empleado, una institución sin ánimo de lucro cuyos ingresos, señaló, provienen en un 55 por ciento de subvenciones, ya que su labor fundamental es la educativa. Esta fundación, a la que Benedicto dijo estar vinculado desde hace más de 40 años, es la que "tiene participación en sociedades mercantiles y no yo", subrayó.
Por su parte, el portavoz socialista en la Comisión de Investigación, Modesto Nolla, calificó de "estrambótica" la relación que "se pretende establecer" entre la actividad profesional de Enrique Benedicto y la supuesta trama urbanística que existe en el seno del PSOE. Durante su turno, Nolla preguntó al marido de Porta acerca de la relación de algunas de las empresas vinculadas a la Fundación Hogar del Empleado con la adjudicación de suelo en algunos municipios de Madrid. En referencia a si la empresa Indorrenta participó en alguna subasta de suelo público en Humanes, Benedicto respondió que sí había concurrido, pero que no se adjudicó a esta empresa sino a otra. Este caso, que no quedó aclarado tras esta respuesta, seguramente volverá a salir este jueves en la Comisión de Investigación, en este caso a preguntas del portavoz del PP, Antonio Beteta.
Me odian. ¿una paranoia familiar?
Cuando concluyó la ronda de preguntas de Modesto Nolla, llegó el turno de Beteta, a quien Mamblona le explicó que empezó a abandonar sus actividades económica y mercantil en 2001, cuando su mujer, Ruth Porta, "empezó a tener responsabilidades políticas" como secretaria de Política Institucional de la Federación Socialista Madrileña (FSM). "En este momento –en el que Porta es además portavoz adjunta del Grupo parlamentario en la Asamblea de Madrid– no tengo ninguna actividad profesional ni tengo ninguna actividad mercantil", indicó Benedicto. Tras ser preguntado por Beteta sobre otras actividades profesionales mientras era director de servicios del Ayuntamiento de Collado Villalba, cargo para el que el alcalde le nombró en mayo de 2000 y en el que permaneció ocho meses, Mamblona aseguró que se había dado de baja en el Instituto de Actividades Económicas (IAE).
Beteta le interrogó sobre si prestó servicios a través de su empresa Camp de Ric a la sociedad Indocasa , participada por la Fundación Hogar del Empleado, autocontratándose como asesor, como había publicado la revista Interviú , y si cobró dietas por su participación en consejos de administración de sociedades de esta entidad. Mamblona señaló que, mientras trabajó a tiempo completo para el Ayuntamiento de Collado Villalba, "no facturé ni un duro por Camp de Ric" y "tampoco facturé un duro como profesional" aunque "cobre dietas de dos sociedades". Entonces, Beteta criticó que llegara a la conclusión de que cobrar dietas "era compatible" con el trabajo de "funcionario de confianza del alcalde" sin informar al Pleno del Ayuntamiento, a lo que Mamblona cambió su perfil tranquilo y le espetó: "Yo entiendo que ustedes odien, políticamente hablando claro, a mi mujer pero lo que no entiendo es que la tomen conmigo". Tras las palabras de Mamblona, que bien pudieran demostrar una paranoia contagiada por su propia esposa, mucho más venal que su marido, Antonio Beteta le aclaró que no odia a su mujer "ni políticamente, ni de ninguna manera" y señaló que "otra cosa es que tenga discrepancias respecto a planteamientos políticos".
El papel de Mamblona en la “crisis” de Madrid
Enrique Benedicto Mamblona es considerado como uno de los enemigos declarados de los "Balbases" (seguidores de José Luis Balbás, dirigente de la corriente de los "Renovadores por la base"), como lo demuestra la carta que envió a la Comisión de Ética del PSOE, en la que denunciaba algunas actividades supuestamente ilícitas de Eduardo Tamayo y José Luis Balbás. Aunque él en su comparecencia se ha referido a la carta como una "información" al Comité de Ética, también ha reconocido que no sabe dónde acabó su denuncia, aunque quien lo ha contado abiertamente es José Luis Balbás, que reconoció ante la Comisión de Investigación que su amigo José Blanco, secretario de Organización del PSOE, le informó de que aquello había quedado archivado. Sin embargo, parece que los "Balbases" no olvidaron la afrenta y, cuando Rafael Simacas estaba a punto de convertirse en presidente de la Comunidad de Madrid –donde iba a nombrar consejera, quizá de Vivienda, a Ruth Porta–, Eduardo Tamayo y Maite Sáez dejaron a Simancas con la miel en los labios.
El PSOE de Madrid optó por ocultar sus problemas internos y elaboró la teoría de la "trama" político-inmobiliaria. Sin embargo, por lo visto hasta ahora en la Comisión de Investigación, el PSOE no tiene pruebas para demostrar que el Partido Popular está implicado en esa supuesta "trama" político-inmobiliaria que dicen que se fraguó para facilitar la espantada de Eduardo Tamayo y Maite Sáez el pasado 10 de junio en la Asamblea de Madrid. Además, excepto Ruth Porta, que tiene que mantener como sea esa versión para garantizarse su propia supervivencia política, ya que hay algunas voces en el PSOE que piden una "depuración" interna por este motivo y hasta Jesús Caldera ha dicho que habrá "cambios" para "recuperar la credibilidad" ante los ciudadanos, el resto de comparecientes en la Comisión de Investigación han negado que exista una "trama" político-inmobiliaria. Lo han negado, como no puede ser de otra manera, el propio Tamayo, su amigo y jefe de filas en los "Renovadores por la base", José Luis Balbás, y Maite Sáez.
También lo han negado el abogado José Esteban Verdes, a quien Tamayo llamó para pedirle consejo profesional sobre "derecho parlamentario", según reconoció el propio Verdes ante la Comisión, y Ricardo Romero de Tejada, secretario general del PP de Madrid, que ha salido peor parado de la Comisión por un olvido: no recordó que su sueldo se lo paga la empresa de copistería de unos amigos suyos y el PSOE le ha acusado de mentir. Sin embargo, no sólo lo han negado los supuestos implicados, sino hasta destacados miembros del Partido Socialista, como Cristina Alberdi, diputada y ex miembro de la Ejecutiva de la Federación Socialista Madrileña, que es quien ha asumido el papel de voz de la conciencia en el PSOE y ha pedido una "depuración" interna en el partido que debería afectar a todos aquellos que han dado alas a la teoría de la "trama" político inmobiliaria. Alberdi ha sido transparente: una lucha de clanes en la FSM provocó la espantada de Tamayo y Sáez.
La comparecencia de Enrique Benedicto Mamblona continuará este jueves por la mañana.
Según ha dicho, esos argumentos que le "vinculan a la trama urbanística en el PSOE" son “ridículos”, porque la Fundación Hogar del Empleado (FUHEM) accedió, de forma directa o indirecta, a dos solares urbanos para la construcción de viviendas. Uno de ellos fue en Colmenar Viejo, adjudicado por el Ayuntamiento, gobernado por el PP, y el otro adjudicado por el Consorcio Urbanístico Parla-Este, presidido entonces por el actual portavoz del Grupo Popular de la Asamblea, Luis Eduardo Cortés, y participado en un 55 por ciento por la Comunidad, gobernada también por el PP. Además, Benedicto detalló su actividad profesional para defender su "honorabilidad" que, según afirmó, ha puesto en entredicho el diputado tránsfuga Eduardo Tamayo al atribuirle supuestos intereses inmobiliarios para justificar su deserción. En este contexto, Mamblona acusó a Tamayo de "inventarse la historia de un enfrentamiento con él", atribuyéndole una serie de "supuestos intereses inmobiliarios" que "jamás he tenido" para justificar su espantada de la Asamblea de Madrid.
Niega tener "negocios" y se define como asesor
De esta manera, argumentó que los llamados "negocios del marido de Ruth Porta" se limitan a no tener responsabilidad alguna en la gestión de las sociedades en las que participa la Fundación y aseguró que ni tiene voto para elegir a los responsables de la administración de las mismas, ni es administrador de ninguna de ellas, ni posee participación accionarial, ni pertenece al patronato. Igualmente, señaló que su patrimonio es "absolutamente discreto" puesto que se reduce, aseguró, a la mitad de su casa, un coche y 4.408 euros de inversión financiera. Además de su dedicación a la Fundación, su actividad profesional, según resumió, se ha centrado en el asesoramiento municipal, la gestión de organismos y empresas públicas, empresas de economía social o empresas privadas en crisis, entre otras tareas.
En concreto, mencionó los trabajos realizados entre 1994 y 1996 para dos empresas públicas -como director financiero en Arpegio y como director general en Informática Comunidad de Madrid (ICM)- y destacó entre sus cometidos el diseño del plan financiero para la construcción de las nuevas líneas de Metro "que desarrolló posteriormente el Gobierno de Ruiz-Gallardón". En su intervención se refirió de forma extensa a la actividad de la Fundación Hogar del Empleado, una institución sin ánimo de lucro cuyos ingresos, señaló, provienen en un 55 por ciento de subvenciones, ya que su labor fundamental es la educativa. Esta fundación, a la que Benedicto dijo estar vinculado desde hace más de 40 años, es la que "tiene participación en sociedades mercantiles y no yo", subrayó.
Por su parte, el portavoz socialista en la Comisión de Investigación, Modesto Nolla, calificó de "estrambótica" la relación que "se pretende establecer" entre la actividad profesional de Enrique Benedicto y la supuesta trama urbanística que existe en el seno del PSOE. Durante su turno, Nolla preguntó al marido de Porta acerca de la relación de algunas de las empresas vinculadas a la Fundación Hogar del Empleado con la adjudicación de suelo en algunos municipios de Madrid. En referencia a si la empresa Indorrenta participó en alguna subasta de suelo público en Humanes, Benedicto respondió que sí había concurrido, pero que no se adjudicó a esta empresa sino a otra. Este caso, que no quedó aclarado tras esta respuesta, seguramente volverá a salir este jueves en la Comisión de Investigación, en este caso a preguntas del portavoz del PP, Antonio Beteta.
Me odian. ¿una paranoia familiar?
Cuando concluyó la ronda de preguntas de Modesto Nolla, llegó el turno de Beteta, a quien Mamblona le explicó que empezó a abandonar sus actividades económica y mercantil en 2001, cuando su mujer, Ruth Porta, "empezó a tener responsabilidades políticas" como secretaria de Política Institucional de la Federación Socialista Madrileña (FSM). "En este momento –en el que Porta es además portavoz adjunta del Grupo parlamentario en la Asamblea de Madrid– no tengo ninguna actividad profesional ni tengo ninguna actividad mercantil", indicó Benedicto. Tras ser preguntado por Beteta sobre otras actividades profesionales mientras era director de servicios del Ayuntamiento de Collado Villalba, cargo para el que el alcalde le nombró en mayo de 2000 y en el que permaneció ocho meses, Mamblona aseguró que se había dado de baja en el Instituto de Actividades Económicas (IAE).
Beteta le interrogó sobre si prestó servicios a través de su empresa Camp de Ric a la sociedad Indocasa , participada por la Fundación Hogar del Empleado, autocontratándose como asesor, como había publicado la revista Interviú , y si cobró dietas por su participación en consejos de administración de sociedades de esta entidad. Mamblona señaló que, mientras trabajó a tiempo completo para el Ayuntamiento de Collado Villalba, "no facturé ni un duro por Camp de Ric" y "tampoco facturé un duro como profesional" aunque "cobre dietas de dos sociedades". Entonces, Beteta criticó que llegara a la conclusión de que cobrar dietas "era compatible" con el trabajo de "funcionario de confianza del alcalde" sin informar al Pleno del Ayuntamiento, a lo que Mamblona cambió su perfil tranquilo y le espetó: "Yo entiendo que ustedes odien, políticamente hablando claro, a mi mujer pero lo que no entiendo es que la tomen conmigo". Tras las palabras de Mamblona, que bien pudieran demostrar una paranoia contagiada por su propia esposa, mucho más venal que su marido, Antonio Beteta le aclaró que no odia a su mujer "ni políticamente, ni de ninguna manera" y señaló que "otra cosa es que tenga discrepancias respecto a planteamientos políticos".
El papel de Mamblona en la “crisis” de Madrid
Enrique Benedicto Mamblona es considerado como uno de los enemigos declarados de los "Balbases" (seguidores de José Luis Balbás, dirigente de la corriente de los "Renovadores por la base"), como lo demuestra la carta que envió a la Comisión de Ética del PSOE, en la que denunciaba algunas actividades supuestamente ilícitas de Eduardo Tamayo y José Luis Balbás. Aunque él en su comparecencia se ha referido a la carta como una "información" al Comité de Ética, también ha reconocido que no sabe dónde acabó su denuncia, aunque quien lo ha contado abiertamente es José Luis Balbás, que reconoció ante la Comisión de Investigación que su amigo José Blanco, secretario de Organización del PSOE, le informó de que aquello había quedado archivado. Sin embargo, parece que los "Balbases" no olvidaron la afrenta y, cuando Rafael Simacas estaba a punto de convertirse en presidente de la Comunidad de Madrid –donde iba a nombrar consejera, quizá de Vivienda, a Ruth Porta–, Eduardo Tamayo y Maite Sáez dejaron a Simancas con la miel en los labios.
El PSOE de Madrid optó por ocultar sus problemas internos y elaboró la teoría de la "trama" político-inmobiliaria. Sin embargo, por lo visto hasta ahora en la Comisión de Investigación, el PSOE no tiene pruebas para demostrar que el Partido Popular está implicado en esa supuesta "trama" político-inmobiliaria que dicen que se fraguó para facilitar la espantada de Eduardo Tamayo y Maite Sáez el pasado 10 de junio en la Asamblea de Madrid. Además, excepto Ruth Porta, que tiene que mantener como sea esa versión para garantizarse su propia supervivencia política, ya que hay algunas voces en el PSOE que piden una "depuración" interna por este motivo y hasta Jesús Caldera ha dicho que habrá "cambios" para "recuperar la credibilidad" ante los ciudadanos, el resto de comparecientes en la Comisión de Investigación han negado que exista una "trama" político-inmobiliaria. Lo han negado, como no puede ser de otra manera, el propio Tamayo, su amigo y jefe de filas en los "Renovadores por la base", José Luis Balbás, y Maite Sáez.
También lo han negado el abogado José Esteban Verdes, a quien Tamayo llamó para pedirle consejo profesional sobre "derecho parlamentario", según reconoció el propio Verdes ante la Comisión, y Ricardo Romero de Tejada, secretario general del PP de Madrid, que ha salido peor parado de la Comisión por un olvido: no recordó que su sueldo se lo paga la empresa de copistería de unos amigos suyos y el PSOE le ha acusado de mentir. Sin embargo, no sólo lo han negado los supuestos implicados, sino hasta destacados miembros del Partido Socialista, como Cristina Alberdi, diputada y ex miembro de la Ejecutiva de la Federación Socialista Madrileña, que es quien ha asumido el papel de voz de la conciencia en el PSOE y ha pedido una "depuración" interna en el partido que debería afectar a todos aquellos que han dado alas a la teoría de la "trama" político inmobiliaria. Alberdi ha sido transparente: una lucha de clanes en la FSM provocó la espantada de Tamayo y Sáez.
La comparecencia de Enrique Benedicto Mamblona continuará este jueves por la mañana.