LD (Agencias) La madrugada de este miércoles, soldados y blindados israelíes han invadido el campo de refugiados de Tulkarem matando a Islam Ghanem, de 16 años, y a su hermano Said Ghanem, de 15 años. Otros cinco residentes resultaron heridos y fueron ingresados en hospitales de Israel, informaron fuentes militares. Todas las ciudades de Cisjordania están cercadas por las tropas y fuentes militares pronosticaban que se producirán incursiones en otras localidades, pues los organismos de seguridad cuentan con treinta llamadas de alerta sobre posibles ataques palestinos. De hecho, más de dos millones de palestinos en Cisjordania se hallan bajo un estrecho estado de sitio desde el atentado suicida.
En el centro de Naplusa, con 180.000 habitantes, el toque de queda fue impuesto después de entrar un número indeterminado de tanques y camiones militares -que se hallaban rodeando la localidad en los extramuros- al centro de la ciudad. La operación "Armonía perfecta", que se aplica en esa localidad, fue aprobada en la reunión del Gabinete para Asuntos Políticos y de Seguridad.
La invasión en Cisjordania comenzó por el mercado del casco antiguo de esa ciudad, un baluarte de Hamas, que reivindicó el atentado terrorista de Jerusalén, así como de Al-Fatah y del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP). Según testigos palestinos, la incursión fue emprendida de madrugada por decenas de soldados israelíes en jeep, apoyados por un helicóptero de la Fuerza Aérea, y menos de diez tanques. Una fuente militar informó del arresto de al menos tres palestinos miembros de la resistencia contra la ocupación israelí. Finalmente, en la ciudad vecina de Jenín, del norte de Cisjordania, testigos palestinos informaron de la incursión de veinte tanques israelíes.
Desde Tel-Aviv, la oficina del primer ministro israelí dio a conocer un comunicado a fin de aclarar que las operaciones militares a gran escala -suspendidas desde que la resistencia palestina proclamó unilateralmente un alto el fuego de noventa días con Israel- están "dirigidas contra los terroristas, no contra la Autoridad Nacional Palestina (ANP)" y su primer ministro, Abu Mazen.
En el centro de Naplusa, con 180.000 habitantes, el toque de queda fue impuesto después de entrar un número indeterminado de tanques y camiones militares -que se hallaban rodeando la localidad en los extramuros- al centro de la ciudad. La operación "Armonía perfecta", que se aplica en esa localidad, fue aprobada en la reunión del Gabinete para Asuntos Políticos y de Seguridad.
La invasión en Cisjordania comenzó por el mercado del casco antiguo de esa ciudad, un baluarte de Hamas, que reivindicó el atentado terrorista de Jerusalén, así como de Al-Fatah y del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP). Según testigos palestinos, la incursión fue emprendida de madrugada por decenas de soldados israelíes en jeep, apoyados por un helicóptero de la Fuerza Aérea, y menos de diez tanques. Una fuente militar informó del arresto de al menos tres palestinos miembros de la resistencia contra la ocupación israelí. Finalmente, en la ciudad vecina de Jenín, del norte de Cisjordania, testigos palestinos informaron de la incursión de veinte tanques israelíes.
Desde Tel-Aviv, la oficina del primer ministro israelí dio a conocer un comunicado a fin de aclarar que las operaciones militares a gran escala -suspendidas desde que la resistencia palestina proclamó unilateralmente un alto el fuego de noventa días con Israel- están "dirigidas contra los terroristas, no contra la Autoridad Nacional Palestina (ANP)" y su primer ministro, Abu Mazen.