(Libertad Digital) Miguel Sebastián ha explicado a Iñaki Gabilondo en la Cadena SER que recibió el encargo de "hacer una propuesta inicial que luego el Partido Socialista la desarrollará". Matizó que es "un encargo externo pero con colaboración interna" por lo que se incorporaron parte de economistas del PSOE. Respecto a su relación con el partido, dijo que no es militante, que no se lo ha planteado ni nadie se lo ha preguntado. Dijo que elaborar el programa económico del PSOE es un "experimento muy interesante" y añadió que su equipo lo forman "seis economistas jóvenes full time y un anillo de colaboradores a tiempo parcial".
Por cierto, que aseguró que muchos de sus colaboradores "no dan su identidad porque vivimos en un país en el que se persigue" a quien colabora, "aunque sea fuera de su tiempo de trabajo", con un partido político. Denunció el "nivel de persecución a los economistas que colaboran en el PSOE" y añadió que "más de la mitad" de los que trabajan con él en el programa "prefieren mantenerse en el anonimato". "Están temerosos" y "tienen que quedarse en el armario", añadió Sebastián, que dijo que esa persecución fue "uno de los motores que le han impulsado" a aceptar la propuesta de Zapatero.
Se rió con Sevilla comentando "algunos programas de humor"
También dedicó palabras a su rival en el PSOE, Jordi Sevilla. Dice que "hubo un malentendido", pero que él "con Jordi" habla con frecuencia. "El viernes comentamos con risas lo que habíamos visto en algunos programas de humor", añadió en posible referencia a la conversación privada que captaron los micrófonos sin que Zapatero y Sevilla se dieran cuenta.
Sebastián dijo que entre las propuestas de PP Y PSOE existen dos diferencias fundamentales: "Frente al ladrillo, educación e innovación y frente al intervencionismo, libertad económica" . En lo que sí está de acuerdo con el PP es en que no se deben subir los impuestos. Aunque hay matices: "No se debe subir el conjunto de la presión fiscal, pero eso no quiere decir que no quepa la posibilidad de hacer cambios". El ex jefe de estudios del BBVA quiere hacer "más justo y equitativo" el IRPF. No fue tan claro a la hora de hablar de su antigua propuesta de tipo único. Dijo que "está encima de la mesa" y que su intención "es darle un enfoque global a la fiscalidad".
Gabilondo descubre la vena humorística de Sebastián
Más curioso fue el simil que encontró entre las hemorroides y la supuesta ocultación de datos económicos por parte del Gobierno. "Los economistas las sufrimos en silencio", dijo, algo que calificó de "lamentable desde un punto de vista democrático". Sebastián mantuvo este tono humorístico para justificar su denuncia de la existencia de un déficit oculto: "Tiene más maquillaje que el planeta de los simios". Defendió como progresista el concepto de estabilidad presupuestaria, pero criticó que el PP convierta el déficit cero en el objetivo de la política. "No debe ser un objetivo sino una restricción a medio plazo. No todo los años tiene que haber déficit cero", añadió.
Sebastián mostró su preocupación porque "no sabemos cuánto ha pillado el Gobierno recaudando con la burbuja inmobiliaria". Y no dudó en mandar un mensaje de preocupación a los millones de españoles que se han comprado un piso en los últimos años: "El PP nos ha metido en un lío con la subida de la vivienda. Al ritmo al que va, el riesgo de caída de los precios es creciente". "Lo dice el FMI que no son peligrosos radicales izquierdistas", apuntó.
Por cierto, que aseguró que muchos de sus colaboradores "no dan su identidad porque vivimos en un país en el que se persigue" a quien colabora, "aunque sea fuera de su tiempo de trabajo", con un partido político. Denunció el "nivel de persecución a los economistas que colaboran en el PSOE" y añadió que "más de la mitad" de los que trabajan con él en el programa "prefieren mantenerse en el anonimato". "Están temerosos" y "tienen que quedarse en el armario", añadió Sebastián, que dijo que esa persecución fue "uno de los motores que le han impulsado" a aceptar la propuesta de Zapatero.
Se rió con Sevilla comentando "algunos programas de humor"
También dedicó palabras a su rival en el PSOE, Jordi Sevilla. Dice que "hubo un malentendido", pero que él "con Jordi" habla con frecuencia. "El viernes comentamos con risas lo que habíamos visto en algunos programas de humor", añadió en posible referencia a la conversación privada que captaron los micrófonos sin que Zapatero y Sevilla se dieran cuenta.
Sebastián dijo que entre las propuestas de PP Y PSOE existen dos diferencias fundamentales: "Frente al ladrillo, educación e innovación y frente al intervencionismo, libertad económica" . En lo que sí está de acuerdo con el PP es en que no se deben subir los impuestos. Aunque hay matices: "No se debe subir el conjunto de la presión fiscal, pero eso no quiere decir que no quepa la posibilidad de hacer cambios". El ex jefe de estudios del BBVA quiere hacer "más justo y equitativo" el IRPF. No fue tan claro a la hora de hablar de su antigua propuesta de tipo único. Dijo que "está encima de la mesa" y que su intención "es darle un enfoque global a la fiscalidad".
Gabilondo descubre la vena humorística de Sebastián
Más curioso fue el simil que encontró entre las hemorroides y la supuesta ocultación de datos económicos por parte del Gobierno. "Los economistas las sufrimos en silencio", dijo, algo que calificó de "lamentable desde un punto de vista democrático". Sebastián mantuvo este tono humorístico para justificar su denuncia de la existencia de un déficit oculto: "Tiene más maquillaje que el planeta de los simios". Defendió como progresista el concepto de estabilidad presupuestaria, pero criticó que el PP convierta el déficit cero en el objetivo de la política. "No debe ser un objetivo sino una restricción a medio plazo. No todo los años tiene que haber déficit cero", añadió.
Sebastián mostró su preocupación porque "no sabemos cuánto ha pillado el Gobierno recaudando con la burbuja inmobiliaria". Y no dudó en mandar un mensaje de preocupación a los millones de españoles que se han comprado un piso en los últimos años: "El PP nos ha metido en un lío con la subida de la vivienda. Al ritmo al que va, el riesgo de caída de los precios es creciente". "Lo dice el FMI que no son peligrosos radicales izquierdistas", apuntó.