L D (EFE) Unas 135.000 copias de esa obra sobre la vida de la princesa de Gales salieron este lunes a la venta en el Reino Unido, en plena pelea entre Burrell y la familia real británica. "Un deber real", basado en cartas privadas de la princesa, ha enfurecido a los hijos de Diana, los príncipes Guillermo y Enrique, que han acusado a Burrell de traicionar a su madre de manera "fría y flagrante".
De acuerdo con el libro, la ex esposa del príncipe Carlos estaba convencida de que sería víctima de una conspiración para matarla en un accidente de tráfico. En declaraciones a la cadena de televisión Channel 4, Burrell aseguró este lunes que "Guillermo y Enrique no tienen nada que temer de mí, y tampoco la Reina".
De acuerdo con el libro, la ex esposa del príncipe Carlos estaba convencida de que sería víctima de una conspiración para matarla en un accidente de tráfico. En declaraciones a la cadena de televisión Channel 4, Burrell aseguró este lunes que "Guillermo y Enrique no tienen nada que temer de mí, y tampoco la Reina".
La punta del iceberg
En su libro, los tres se libran de revelaciones poco favorecedoras como las que han afectado al conde Charles Spencer, hermano de Diana, al príncipe de Edimburgo, esposo de la Reina, y, desde luego, al príncipe de Gales, a quien Burrell ha confesado que en más de un momento ha querido "agarrar del cuello". En varias ocasiones, el ex mayordomo ha señalado que lo revelado es sólo "la punta del iceberg" y ya se especula con una secuela de su libro todavía más demoledor que el recientemente publicado, que ha hecho millonario a Burrell.
En un comunicado sin precedentes, los príncipes Enrique y Guillermo expresaron el pasado viernes su malestar por la publicación de "Un deber real" y aseguraron que hubiera "mortificado" a su madre si estuviera viva. Un portavoz del Palacio de Buckingham señaló este lunes que la reina apoya a su nieto Guillermo, quien se ha mostrado dispuesto a entrevistarse con Paul Burrell para parar la cascada de revelaciones.
En su libro, los tres se libran de revelaciones poco favorecedoras como las que han afectado al conde Charles Spencer, hermano de Diana, al príncipe de Edimburgo, esposo de la Reina, y, desde luego, al príncipe de Gales, a quien Burrell ha confesado que en más de un momento ha querido "agarrar del cuello". En varias ocasiones, el ex mayordomo ha señalado que lo revelado es sólo "la punta del iceberg" y ya se especula con una secuela de su libro todavía más demoledor que el recientemente publicado, que ha hecho millonario a Burrell.
En un comunicado sin precedentes, los príncipes Enrique y Guillermo expresaron el pasado viernes su malestar por la publicación de "Un deber real" y aseguraron que hubiera "mortificado" a su madre si estuviera viva. Un portavoz del Palacio de Buckingham señaló este lunes que la reina apoya a su nieto Guillermo, quien se ha mostrado dispuesto a entrevistarse con Paul Burrell para parar la cascada de revelaciones.