L D (EFE) Según el vicepresidente y consejero delegado de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, las causas de este incremento han sido evolución positiva de los negocios de generación en España y México, que crecieron un 12,9 y un 28 por ciento, respectivamente, y la contención de los gastos operativos, que aumentaron sólo un 0,9 por ciento.
El 95,5 por ciento del beneficio de Iberdrola procede de España, en especial del negocio energético (73,9 por ciento), y el 4,5 por ciento restante de Latinoamérica. Para el cierre del ejercicio, la compañía espera "mantener e incluso mejorar" el resultado de los nueve primeros meses. Por ello, Sánchez Galán propondrá el próximo 10 de diciembre al Consejo de Administración un aumento del dividendo a cuenta del 10 por ciento, hasta 0,286 euros por acción, cantidad que se pagará a partir del 2 de enero.
La cifra de negocio de Iberdrola se redujo un 4,3 por ciento entre enero y septiembre, hasta 7.032,8 millones, por la caída de los precios de la electricidad en el mercado mayorista de generación. Sin embargo, este descenso no ha influido en los resultados operativos, ya que ha estado acompañada por una disminución de los costes de aprovisionamiento y una contención de los gastos operativos.
La deuda neta disminuyó en 241 millones hasta situarse en 10.446 millones, mientras que el apalancamiento (relación entre deuda y fondos propios) descendió desde el 57,1 por ciento al 55,3 por ciento. En los últimos doce meses, Iberdrola ha recortado su deuda en 699 millones, a pesar de haber acometido inversiones por importe de 2.337 millones (2.009 millones en España, 195 millones en México y 133 millones en Brasil).
En los nueve primeros meses del año, las inversiones ascendieron a 1.588 millones: 1.363 millones en España, 169 millones en México y 56 millones en Sudamérica. Según Sánchez Galán, Iberdrola prevé instalar 1.600 megavatios adicionales a los 4.000 contemplados en el Plan Estratégico 2002-2006. Estos 1.600 megavatios, que estarán operativos entre 2006 y principios de 2007, se repartirán entre Escombreras (Murcia) y Castellón. Sánchez Galán explicó que la inversión adicional en España se compensará con la reducción prevista en México, donde se instalarán 3.800 megavatios en vez de los 5.000 previstos, debido a la falta de concursos.
En cuanto al programa de desinversiones, el saldo obtenido desde el inicio del Plan Estratégico asciende a 2.826 millones, muy cerca de los 3.000 millones fijados como objetivo. Destaca la venta de la participación en Repsol YPF, por la que Iberdrola ha obtenido 576 millones (462 millones en los nueve primeros meses y 114 millones en octubre). Sánchez Galán aseguró que, por el momento, no se esperan desinversiones adicionales.