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Montoro rechaza la rebaja de las cotizaciones empresariales solicitada por la CEOE

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha descartado una rebaja generalizada de las cotizaciones sociales, que han reclamado tanto el presidente de la CEOE, José María Cuevas, en las últimas semanas, como el vicepresidente, Arturo Gil, este mismo lunes.

LD (EFE) Durante una jornada organizada por la APD, Gil volvió a insistir en que la "holgura" de los presupuestos debería revertir en una bajada de 2 puntos de las cuotas que pagan los empresarios a la Seguridad Social y Sevilla denunció el impuesto encubierto que éstas representan.

El titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, respondió que el Gobierno prefiere, mejor que adoptar una reducción generalizada, continuar por la senda de las bajadas selectivas para aquellos colectivos con más dificultades a la hora de encontrar un empleo –discapacitados, mujeres, parados de largo duración, entre otros–.
 
En su intervención, Montoro calculó que la inversión pública propiciará el año que viene ocho décimas de aumento del PIB y la creación de 50.000 nuevos empleos y valoró los presupuestos para el 2004 que, recordó, están comprometidos con el equilibrio. El ministro afirmó que "el 'déficit cero' no es una obsesión, sino una necesidad", pues sin el saneamiento de las cuentas públicas España no habría logrado mantener un diferencial positivo de crecimiento con la UE ni crear más de cuatro millones de empleos en ocho años.

El secretario de Estado de Economía, Luis de Guindos , quien también participó en la jornada, afirmó que, según los datos disponibles, en el tercer trimestre el PIB español continuó la "tendencia de aceleración" mostrada en los trimestres anteriores. En su opinión, en el 2004 la economía se irá acercando progresivamente a su potencial y continuará generando empleo y todo ello después de haber superado una crisis internacional muy compleja sin dejar de avanzar en convergencia real con la UE.

El portavoz económico del PSOE, Jordi Sevilla, quien también participó en estas jornadas, aseguró que los presupuestos para el año que viene encubren un déficit del 1,6 por ciento del PIB y declaró que el término "convergencia real" omite el importante déficit que España tiene en capital tecnológico y físico, en infraestructuras, en calidad del empleo y en coberturas sociales.

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