L D (Agencias) Quedan poco más de cuatro meses para que se celebren las elecciones generales y el PP –sin Aznar como candidato– ya ha puesto en marcha su maquinaria electoral aprovechando la inercia tras el triunfo de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid. Las citas electorales en Andalucía y Cataluña y la necesidad de que todo el partido "apoye" a Mariano Rajoy, han sido los ejes del discurso de Aznar en La Carolina en un almuerzo con afiliados y simpatizantes del PP.
El presidente del Gobierno comenzó, por la cercanía de la fecha electoral, defendiendo la "estabilidad" que aporta el candidato popular en las elecciones catalanas del domingo, Josep Piqué. Si de Rajoy dijo que es "el mejor entre nosotros", para Piqué tuvo un elogio similar, aunque restringido: "Es el mejor de todos los miembros del Partido Popular catalán". Tras alabar la gestión ministerial del candidato catalán, reconoció que los del domingo son "unos comicios difíciles" para el PP, pero dejó un resquicio para el optimismo con un deseo: "Espero que Cataluña sepa apreciar la candidatura de Piqué". Tras ello, el presidente del Gobierno se felicitó porque "el PP le ha sentado muy bien a Cataluña como le ha sentado muy bien a España".
Ganar con Rajoy y "por mayoría". La agenda de Aznar
Pero el discurso de Aznar tenía como objetivo una clara llamada al PP para que se vuelque con Mariano Rajoy. De hecho, fuentes del PP consultadas por Libertad Digital, aseguran que en la agenda política del presidente, el candidato es ya una prioridad de aquí a marzo. Sus compromisos internacionales pasan por una gira por el norte de África donde visitará Argelia, Marruecos y Túnez. En Europa, le espera un breve viaje a Londres para asistir a un acto organizado por The Wall Street Journal y la despedida de la presidencia italiana en el Consejo Europeo. Podría haber también alguna visita a George Bush pero todo apunta a que en estos cuatro meses que quedan para marzo de 2004, y sobre todo a partir de enero, Aznar se esforzará en dejar claro que Rajoy es quien tiene que ganar en 2004.
Ganar con Rajoy y "por mayoría". La agenda de Aznar
Pero el discurso de Aznar tenía como objetivo una clara llamada al PP para que se vuelque con Mariano Rajoy. De hecho, fuentes del PP consultadas por Libertad Digital, aseguran que en la agenda política del presidente, el candidato es ya una prioridad de aquí a marzo. Sus compromisos internacionales pasan por una gira por el norte de África donde visitará Argelia, Marruecos y Túnez. En Europa, le espera un breve viaje a Londres para asistir a un acto organizado por The Wall Street Journal y la despedida de la presidencia italiana en el Consejo Europeo. Podría haber también alguna visita a George Bush pero todo apunta a que en estos cuatro meses que quedan para marzo de 2004, y sobre todo a partir de enero, Aznar se esforzará en dejar claro que Rajoy es quien tiene que ganar en 2004.
Este lunes, en La Carolina, ya ha recordado que el PP ha elegido "al mejor de entre nosotros: Mariano Rajoy", a quien dijo que "tenemos que ayudar, y apoyar para que ganemos las elecciones por mayoría" porque "España necesita más años de buena estabilidad y tenemos desafíos importantes por delante". En ese punto, advirtió de que "si alguien quiere quebrar la estabilidad de España, se va a equivocar" porque el PP será "garante de que eso no va a ocurrir y mantendremos la estabilidad del país" y continuarán los "procesos de reformas que tan buenos resultados han dado".
Un banquillo "brillante"
Con su despedida de la candidatura como fondo, Aznar recordó a los asistentes que la actual generación de políticos del PP "es de lo más brillante que ha conocido la democracia española", ya que, a su juicio, "la unidad y la cohesión del Partido Popular están demostradas". Por ello, les insistió que el PP "es una formación que no tiene que tener complejos al defender lo que piensa". Refiriéndose a su retirada, expresó la "satisfacción de que dejaré las cosas mejor de como las encontré", y manifestó su deseo de que "otros consigan para España lo que ya hemos comenzado". De nuevo el relevo y la consigna de apoyo a Rajoy.
El presidente aprovechó la inminencia de las elecciones catalanas y su presencia en Jaén para referirse a los próximos comicios andaluces, "que no sé cuándo serán", pero que confió en que permitan a los andaluces empezar a ver las estadísticas "por arriba y no por abajo", después de "toda una vida" de gestión socialista al frente de la Junta de Andalucía.
A su juicio, esta comunidad autónoma "tiene derecho a estar entre los primeros y no entre los últimos", lo que atribuyó "no a los andaluces", sino a "más de 20 años sin un buen gobierno", por lo que concluyó que es momento de decir "ya vale, sabemos que son capaces de hacerlo mal, pero ha llegado el momento de que Andalucía tenga una oportunidad". Se preguntó "por qué lo que ha pasado en todo el conjunto de España no puede pasar" en esta región y animó a los asistentes al almuerzo a "afrontar las elecciones andaluzas con ánimos ganadores", como los comicios generales de marzo.
A su juicio, esta comunidad autónoma "tiene derecho a estar entre los primeros y no entre los últimos", lo que atribuyó "no a los andaluces", sino a "más de 20 años sin un buen gobierno", por lo que concluyó que es momento de decir "ya vale, sabemos que son capaces de hacerlo mal, pero ha llegado el momento de que Andalucía tenga una oportunidad". Se preguntó "por qué lo que ha pasado en todo el conjunto de España no puede pasar" en esta región y animó a los asistentes al almuerzo a "afrontar las elecciones andaluzas con ánimos ganadores", como los comicios generales de marzo.