Crónica del Barcelona 2 - Panionios 0
El triunfo del Barcelona sobre el Panionios, totalmente previsible, ha contado con la colaboración de un rival nulo en ataque y que utilizaba como baza el marcaje individual hasta sus últimas consecuencias, lo que acabó con los jugadores del equipo griego completamente desfondados. La consecuencia de esta derrota podría ser que el técnico Josef Bubenko acabe destituido. Soporífera primera parte en la que el Panionios apostó por la persecución por todo el campo a los barcelonistas en una muestra de lo que es el marcaje individual, aunque escasamente efectivo. El Barça optó por el toque de balón, escasa profundidad y control del partido en la medular. Márquez y Mario, ambos en el eje de la defensa, se hartaron de recibir el balón y enviarlo de un lado a otro a la espera de un compañero libre de marcaje.
El partido se le arregló al Barcelona justo en el momento más comprometido, en la expulsión de Luis Enrique. El asturiano, que se caía del equipo titular hace algunas semanas, reaparecía como titular en búsqueda de una oportunidad, pero la malogró por una acción antideportiva ante la mirada del cuarto árbitro y de uno de los jueces de línea. Ante el acoso y pegajoso marcaje de Raguel, Luis Enrique, tras una falta y con los dos jugadores en el suelo, le soltó un codazo en la cara. Con diez en el campo, sorprendentemente Xavi encontró mejores espacios, también gracias a la mayor movilidad que hubo en ataque. En un rebote provocado por Mario, Saviola recogió el balón fuera del área y ante la salida del meta del Panionios, Drobny, le levantó el balón por encima (1-0).
El gol en contra no motivó ningún cambio en el equipo griega, rendido a perseguir a sus adversarios, además de renunciar a hacerse con el control del balón y buscar la meta de un solitario y aburrido Rustu, a quien le ha perseguido la desgracia este año: suplente de Valdés, ha visto cómo su selección se perderá la Eurocopa, además de quedar relegado a partidos de la UEFA de bajo perfil como el que jugó contra el Panionios. Al Barcelona se le acabó de arreglar el partido en el minuto 43, cuando Luis García marcó el segundo tanto tras recibir un pase preciso de Xavi. El extremo barcelonista dribló al portero y envió el balón al fondo de las mallas, a pesar del intento de un defensa por sacar el balón. En el segundo tiempo, el partido cayó de intensidad hasta el punto que el Barça, con diez desde el minuto 25, dio un paso atrás y permitió a su rival que tocase el balón. Pero ni con éstas el Panionios se sintió con fuerzas para intentar algo ante la meta de Rustu. Kluivert sustituyó a Saviola y su entrada fue recibida con pitos, que se incrementaron en el primer error.
El partido se le arregló al Barcelona justo en el momento más comprometido, en la expulsión de Luis Enrique. El asturiano, que se caía del equipo titular hace algunas semanas, reaparecía como titular en búsqueda de una oportunidad, pero la malogró por una acción antideportiva ante la mirada del cuarto árbitro y de uno de los jueces de línea. Ante el acoso y pegajoso marcaje de Raguel, Luis Enrique, tras una falta y con los dos jugadores en el suelo, le soltó un codazo en la cara. Con diez en el campo, sorprendentemente Xavi encontró mejores espacios, también gracias a la mayor movilidad que hubo en ataque. En un rebote provocado por Mario, Saviola recogió el balón fuera del área y ante la salida del meta del Panionios, Drobny, le levantó el balón por encima (1-0).
El gol en contra no motivó ningún cambio en el equipo griega, rendido a perseguir a sus adversarios, además de renunciar a hacerse con el control del balón y buscar la meta de un solitario y aburrido Rustu, a quien le ha perseguido la desgracia este año: suplente de Valdés, ha visto cómo su selección se perderá la Eurocopa, además de quedar relegado a partidos de la UEFA de bajo perfil como el que jugó contra el Panionios. Al Barcelona se le acabó de arreglar el partido en el minuto 43, cuando Luis García marcó el segundo tanto tras recibir un pase preciso de Xavi. El extremo barcelonista dribló al portero y envió el balón al fondo de las mallas, a pesar del intento de un defensa por sacar el balón. En el segundo tiempo, el partido cayó de intensidad hasta el punto que el Barça, con diez desde el minuto 25, dio un paso atrás y permitió a su rival que tocase el balón. Pero ni con éstas el Panionios se sintió con fuerzas para intentar algo ante la meta de Rustu. Kluivert sustituyó a Saviola y su entrada fue recibida con pitos, que se incrementaron en el primer error.
Crónica del Mallorca 1 - Copenhague 1
El Mallorca ha resuelto su pase a la siguiente ronda con más apuros de los esperados después de que el Copenhague marcara a tres minutos del final para neutralizar el gol de Campano y luchara hasta el final para forzar la prórroga. El equipo balear, con jugadores poco habituales en su once titular, pecó de conformismo en la primera parte y, aunque cedió de forma voluntaria el dominio a los daneses con el objetivo de intentar sorprender al contragolpe, su juego careció de profundidad. Con agujeros tremendos en la zona ancha, donde ni Martín Ligüera, que justificó su suplencia al dar muestras de una indolencia total, ni Martín de la Fuente dieron una a derechas. El Mallorca, en definitiva, se conformó con aguantar el empate a cero. El Copenhague llegó con peligro en varias ocasiones, pero le faltó pegada, como en el minuto 20, cuando Noerregaard, llegando desde atrás, conectó un gran cabezazo que salvó con apuros el meta Miki. Hasta cinco saques de esquina provocaron los daneses, que tuvieron el dominio de las acciones, aunque fracasaron en su intento de marcar un gol que les metiera en la eliminatoria. Luis Aragonés pudo comprobar que algunos de sus jugadores no están en forma, aunque el caso más sangrante es el de Ligüera, contratado para sustituir al Caño Ibagaza, pero que por ahora no logra adaptarse al fútbol español. Fue sustituido en el minuto 53 por Nagore, pero entre el silencio de las gradas.
Cuando mejor jugaban los daneses y Miki se estaba convirtiendo en el mejor jugador de los insulares, Campano, que había sustituido a Raúl Martín, cabeceó con clase un gran centro de Nagore para marcar y dejar sentenciada la eliminatoria. El 1-0 heló las pocas ideas del Copenhague y dio un respiro al Mallorca, que a partir de ese momento, con la eliminatoria en el bolsillo, empezó a recrearse y a pensar ya en los próximos compromisos. Los daneses se encontraron con el gol de Allbrechtsen a tres minutos del final y muy cerca estuvieron de lograr un segundo tanto que hubiese forzado la prórroga, pero lo impidió un Miki soberbio.
Crónica del Torpedo de Moscú 1 - Villarreal 0
Todo fue tranquilo para el Villarreal hasta el minuto 71, en el que llegó el único tanto del encuentro, pero a partir de entonces el partido se jugó a cara o cruz y fueron los hombres de Benito Floro los que, gracias a su aplomo en los últimos instantes, hicieron valer el 2-0 de la ida para lograr el objetivo de clasificarse. El submarino amarillo salió fuerte. Lejos de tratar de conservar el marcador, buscó desde el inicio sentenciar la eliminatoria con un gol que pusiera cuesta arriba el objetivo del Torpedo. Los primeros minutos del segundo tiempo fueron intensos. El Torpedo empezaba a tener urgencias porque pasaban los minutos, aunque era consciente de que cualquier acierto ofensivo de los hombres de Floro iba a ser letal. La falta de criterio de los rusos no se vio acompañada de la claridad de ideas de los visitantes, pero en uno de los ataques cada vez más frecuentes del conjunto moscovita un colocado disparo de Semshov , desde el borde del área, supuso el 1-0 y metió al Torpedo en la eliminatoria. Lo que se presentaba como un final plácido se convirtió en una fase de gran tensión, a pesar de que cuando el equipo de Floro empezaba a pasarlo mal, un contragolpe de José Mari pudo haber supuesto el empate, pero el meta ruso envió la pelota a córner. El Torpedo tuvo luego una ocasión clara para igualar la eliminatoria pero falló. El Villarreal llegó al final del partido y a tercera ronda con mucho sufrimiento.