L D (EFE) En conversación con los periodistas en el transcurso de una recepción en el Congreso de los Diputados con motivo del aniversario de la Constitución, Aznar se mostró convencido de que los líderes de los Quince acudirán a la Cumbre de Bruselas en la que está previsto que se apruebe el texto constitucional "con el espíritu más flexible y abierto posible".
Destacó que "es muy importante saber que los países tienen sus intereses absolutamente legítimos y respetables y que hay que tenerlos en cuenta a la hora de forjar los consensos que nos permitan tener un nuevo tratado constitucional". Explicó que se siente "sustancialmente satisfecho" con la Constitución europea, pero advirtió de que "no estamos satisfechos, como muchos otros países, con que se revisen los acuerdos institucionales de Niza" por considerar que la Convención no tenía mandato para cambiar aquellos acuerdos y que hacerlo supone "abrir un problema innecesariamente".
"La posición de España es bien sencilla", explicó Aznar, "es como quien tiene un modelo de coche determinado que tiene un motor de 100 caballos; España lo que quiere es seguir teniendo un motor de 100 caballos, que el modelo del coche sea uno u otro es más indiferente, que el motor siga siendo de 100 caballos es importante". Se mostró convencido de que "eso lo comprende todo el mundo" del mismo modo que se comprende que haya otros países "cuyo coche y su motor es tener presencia en la Comisión, o que entienden que su coche y su motor exige tener un sistema diferente al actual". Fue entonces cuando afirmó que "con inteligencia, voluntad y flexibilidad podremos llegar a una solución".