La Real Sociedad sufre ante el Galatasaray pero asegura su presencia en octavos (1-1)

L D (EFE) El Galatasaray renunció a lanzar un ataque total en busca de la victoria, resultado que le permitía acceder a la siguiente fase, y se agazapó en su campo para ceder el dominio del partido a los donostiarras y esperar que Sukur conectara algún balón suelto y pudiera batir a Alberto, sustituto obligado de Westerveld por su esguince de tobillo. Las cosas le salieron bien al técnico Fatih Terim porque cuando más agobiaba la Real, con una clara ocasión incluso para marcar por medio de Nihat que Sabri sacó en la línea de gol, llegó el contraataque conducido por Berkant que Hakan Sukur definió con un remate envenenado para salvar la salida desesperada de Alberto y superarle por bajo.

Los donostiarras quedaron en principio desorientados por este tanto encajado en la primera llegada de los turcos, sin embargo se rehicieron enseguida y tuvieron sus mejores minutos con varios avances por la banda de Igor Gabilondo, en uno de las cuales, tras forzar un saque de esquina, De Paula remató con todo a favor al graderío. Gabilondo se constituyó en el principal recurso de la Real para doblegar a un equipo inferior técnicamente aunque con más oficio en esta competición, acostumbrado a jugar y trabar este tipo de encuentros. Los blanquiazules a punto estuvieron de empatar al filo del descanso, en otra jugada de Gabilondo que Nihat, en el área pequeña, no acertó por poco a enviar a gol.

López Rekarte confirmó la negación cara al gol de los donostiarras esta temporada al mandar de forma increíble afuera su remate, tras realizar la mejor jugada del partido y escaparse de tres defensores turcos que trataban de taponar su entrada en el área. La mala fortuna no fue esquiva finalmente a una Real y en el minuto 51 un saque de falta botado por Xabi Alonso estuvo acompañado de un garrafal error defensivo del Galatasaray, que De Paula aprovechó para marcar a placer y dejar libre el camino a los octavos de final. Los últimos minutos fueron de infarto para los guipuzcoanos ante el postrero empuje, sin acierto eso sí, del equipo otomano.