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Detenido el presidente y fundador de Parmalat, Calisto Tanzi, por la bancarrota de la alimentaria

Calisto Tanzi, ex presidente y  accionista mayoritario de Parmalat, inmerso en un grave escándalo financiero, ha sido detenido en Milán y está siendo interrrogado. Horas antes, un Tribunal de Parma había declarado a la empresa en suspensión de pagos por insolvencia.  En España, el ministro Arias Cañete y la empresa Clesa insisten en que la crisis no les afecta porque tienen independencia financiera y jurídica.

L D (Agencias) Tanzi ha sido detenido por la Guardia de Finanzas y la policía fiscal italiana y por orden de la fiscalía de Parma, donde tiene su sede social Parmalat. El detenido está siendo interrogado este mismo domingo en la cárcel de San Vittore, en Milán, en la que se encuentra detenido.
 
El empresario tendrá que responder a las preguntas de los fiscales de las ciudades de Parma y Milán, después de haber sido detenido por la acusaciones vertidas contra él por los magistrados de estas localidades que le consideran culpable de "asociación para delinquir" con el fin de promover una "bancarrota fraudulenta". Desde el pasado miércoles se creía a Tanzi fuera de Italia, ya que no se había presentado a declarar en relación con la crisis de la sociedad. Uno de los abogados de la familia realizó una llamada telefónica desde España explicando que su cliente no había "huido" y que tan solo tenía necesidad de reposo frente a la "excesiva presión por parte de la prensa y de la opinión pública".
 
Como juez delegado el tribunal ha nombrado a Vittorio Zanichelli, cuya primera prioridad será hacer frente a los pagos del suministro lácteo, según informaron fuentes judiciales, para evitar le blouqeo de la producción. Los magistrados del Tribunal de Quiebras han fijado un plazo de 120 días para que los acreedores puedan presentar sus instancias de cobro, sobre las que se establecerá un lista de prioridades. En días pasados varias asociaciones de productores italianos habían amenazado con cortar el suministro por falta de pago.
 
El anuncio del tribunal ha seguido a la toma de declaración de Enrico Bondi, el nuevo presidente de Parmalat y recién nombrado comisario extraordinario por el Gobierno, que el pasado miércoles decidió colocar la sociedad en administración controlada para evitar su quiebra. Bondi ha presentado un informe con el estado del patrimonio del grupo e informado sobre sus proyectos dentro del plan de salvamento que deberá presentar en los próximos días al ministro de Industria, Antonio Marzano. Parmalat es el octavo grupo industrial italiano y emplea a cerca de 37.000 personas en todo el mundo, con numerosas filiales en Latinoamérica.

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