L D (EFE) Carlos Urquijo insistió en que cuando se está produciendo un "desafío no sólo a la Constitución y al marco jurídico-político vigente, sino al conjunto del Estado de Derecho, mi obligación debe ser fortalecer" la Carta Magna.
Anunció que va a preparar un "programa de actuación" en el que se verá de qué manera piensa atender a este "reto" y cómo, a través de las competencias que la Delegación del Gobierno tiene, los ciudadanos perciben la actuación del Gobierno de España y "el impulso que éste ha dado al País Vasco".
Se refirió al mensaje de fin de año del lehendakari, Juan José Ibarretxe, en el que insistió en que convocará una consulta popular si el Parlamento Vasco aprueba su propuesta de nuevo estatuto político y dijo que si el "lehendakari cumple con su amenaza, porque como amenaza lo ha planteado, y si decide convocar una consulta, habrá que ver si se hace conforme a lo que establece la Constitución".
Recordó que la Constitución "establece quién convoca (una consulta) y con la autorización de quién", por lo que "perfectamente se pueden convocar referendos o una consulta si se respeta la ley, lo mismo que se pueden reformar la Constitución y los Estatutos de Autonomía, pero sin plantear órdagos o desafíos y al margen de los mecanismos previstos".
"Creo que debe volver la cordura a la política vasca y sobre todo al Gobierno Vasco, por lo que espero que el lehendakari recapacite y no se empeñe en adoptar una decisión al margen de la ley y se centre en mejorar el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos y no amenace con cuestiones que lo único que hacen es generar frustración, con riesgo de exclusión", recalcó.
Dijo también que si "un ámbito se ha preservado de las desavenencias interinstitucionales" de los últimos años ha sido el relacionado con la seguridad", ya que el Departamento de Interior y el Ministerio "han sabido abstraerse de todo este desencuentro y trabajar en la buena dirección de capturar a los comandos y ponerlos a disposición de los jueces", de "dotar de seguridad a los amenazados y atender a las víctimas del terrorismo".
A juicio de Urquijo, "fue una pena que el Gobierno Vasco y el PNV no se implicaran en la ley para mejorar la seguridad de los concejales, en la ley de Partidos para asfixiar a quienes quieren acabar con la libertad y en todas esas reformas del Código Penal que han ido dirigidas a dar mayor incomodidad a quienes nos quieren hacer la vida imposible". Abogó por "continuar trabajando de manera coordinada entre las dos administraciones", la autonómica y la española en la lucha contra el terrorismo.
Anunció que va a preparar un "programa de actuación" en el que se verá de qué manera piensa atender a este "reto" y cómo, a través de las competencias que la Delegación del Gobierno tiene, los ciudadanos perciben la actuación del Gobierno de España y "el impulso que éste ha dado al País Vasco".
Se refirió al mensaje de fin de año del lehendakari, Juan José Ibarretxe, en el que insistió en que convocará una consulta popular si el Parlamento Vasco aprueba su propuesta de nuevo estatuto político y dijo que si el "lehendakari cumple con su amenaza, porque como amenaza lo ha planteado, y si decide convocar una consulta, habrá que ver si se hace conforme a lo que establece la Constitución".
Recordó que la Constitución "establece quién convoca (una consulta) y con la autorización de quién", por lo que "perfectamente se pueden convocar referendos o una consulta si se respeta la ley, lo mismo que se pueden reformar la Constitución y los Estatutos de Autonomía, pero sin plantear órdagos o desafíos y al margen de los mecanismos previstos".
"Creo que debe volver la cordura a la política vasca y sobre todo al Gobierno Vasco, por lo que espero que el lehendakari recapacite y no se empeñe en adoptar una decisión al margen de la ley y se centre en mejorar el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos y no amenace con cuestiones que lo único que hacen es generar frustración, con riesgo de exclusión", recalcó.
Dijo también que si "un ámbito se ha preservado de las desavenencias interinstitucionales" de los últimos años ha sido el relacionado con la seguridad", ya que el Departamento de Interior y el Ministerio "han sabido abstraerse de todo este desencuentro y trabajar en la buena dirección de capturar a los comandos y ponerlos a disposición de los jueces", de "dotar de seguridad a los amenazados y atender a las víctimas del terrorismo".
A juicio de Urquijo, "fue una pena que el Gobierno Vasco y el PNV no se implicaran en la ley para mejorar la seguridad de los concejales, en la ley de Partidos para asfixiar a quienes quieren acabar con la libertad y en todas esas reformas del Código Penal que han ido dirigidas a dar mayor incomodidad a quienes nos quieren hacer la vida imposible". Abogó por "continuar trabajando de manera coordinada entre las dos administraciones", la autonómica y la española en la lucha contra el terrorismo.