L D (EFE) En una entrevista que publicó este lunes el periódico USA Today (texto íntegro), Cheney afirma que "el jurado aún no se ha pronunciado" acerca de la existencia o no de estas armas no convencionales en Irak.
"En estos momentos todavía estoy muy lejos de llegar a la conclusión de que hubo algún error básico en los datos con los que contábamos", indicó el vicepresidente.
La oposición demócrata ha acusado en numerosas ocasiones al Gobierno estadounidense de haber exagerado la amenaza que representaba Irak para justificar la guerra. Según el vicepresidente, encontrar armas biológicas es algo complicado porque se pueden fabricar en poco tiempo, son perecederas y "no duran mucho, de todos modos". Sin embargo, sí reconoció que los datos que aportan los servicios secretos "nunca son perfectos. Muy raramente son completos al cien por ciento".
El ex secretario del Tesoro Paul O'Neill afirma en un libro publicado la semana pasada que en las reuniones del Consejo de Seguridad Nacional a las que asistió nunca vio ninguna prueba concluyente sobre la existencia de armas químicas o biológicas en Irak. Cheney, que es blanco de críticas especialmente duras en el libro, afirma en la entrevista con Usa Today que se siente "decepcionado" por O'Neill, quien llegó al Tesoro por recomendación suya y al que conoce desde hace más de treinta años.