L D (EFE) REAL MADRID 2 - VILLARREAL 1
El Real Madrid se enfrentaba al Villarreal con la eliminatoria de Copa encarrilada ante el Valencia, pero con muchas dudas sobre su juego y su solvencia en defensa. La ausencia de Pavón ofreció a Álvaro Mejía la oportunidad de debutar en el Santiago Bernabéu y el joven canterano impuso la estabildad y la salida del balón que el conjunto blanco necesitaba. El Real Madrid firmó un notable primer tiempo. Serio atrás, controlando el balón en el medio del campo y manteniendo el olfato goleador intacto. Sin Zidane el esquema blanco se estabilizó y ganó en profundidad en los costados.
De una acción coordinada, con una hermosa pared con Figo, llegó el primer gol de Solari. Un tanto que llevó más calma al equipo de Queiroz y que dejó aturdido al Villarreal, más endeble de lo que se esperaba. Los balones largos que mandaban a Anderson Riquelme o Battaglia eran cortados por la segura zaga blanca. En el segundo tiempo, al Villarreal no le dio tiempo ni a ordenar sus ideas cuando Ronaldo recogió un balón fuera del área y sin pararlo lo proyectó a la escuadra de Reina. Benito Floro intentó cambiar el sino del partido e introdujo un triple cambio dando entrada a Javi Venta, Josico y Víctor. Queiroz también dio entrada a otro canterano, Juanfran.
El final del partido fue el tramo más complicado del Real Madrid, cuando Ballesteros remató de cabeza sólo tras un saque de esquina y puso el 2-1 enel marcador. El conjunto amarillo se lanzó a por el empate pero se acabó el partido. El Real Madrid se pone líder a la espera de lo que haga el Valencia contra el Osasuna el domingo.
ALBACETE 1 - ATLÉTICO DE MADRID 1
El Atlético de Madrid ha dejado escapar en el segundo tiempo un partido que había encarrilado en el primer tiempo con el control del balón y el gol de Nano. La vuelta de Torres al estadio donde marcó su primer gol con el Atlético de Madrid ha sido fugaz, el "Niño" no tuvo su día ante el Albacete. La segunda parte fue de dominio manchego y prueba de ello fue el gol en propia meta de Lequi tras un centro envenenado de Parri. El Albacete, a partir de ahí de hizo con las riendas del encuentro y pudo incluso ganarlo hasta el final del mismo.