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Patxi López defiende el acercamiento al PNV para poder trasladar el modelo catalán al País Vasco

Coincidiendo con la proclamación de Patxi López como candidato a lehendakari, el líder del PSE ha hecho suyo el "giro distinto" que hace sólo unos días propugnaban Ramón Jáuregui y Javier Rojo, y que Zapatero avalaba. Las tesis que ya aplica Maragall en Cataluña son el espejo en el que quieren mirarse los socialistas vascos, que ven en Imaz a su Carod-Rovira particular. El cambio en la cúpula del PNV es la excusa para materializar ese acercamiento a los nacionalistas que Elorza viene defendiendo frente a los que apuestan por un mayor entendimiento con el PP.

L D (EFE) Patxi López se ha presentado como candidato del PSE a lehendakari con el objetivo de hacer posible un nuevo "patriotismo vasco". Su discurso ha vuelto a marcar distancias con el PP pese a que las últimas encuestas apuntan que un acuerdo entre los partidos constitucionalistas podría apartar del Gobierno vasco a los nacionalistas en caso de celebrarse elecciones.
 
Durante su proclamación como candidato de su partido a lehendakari en los próximos comicios autonómicos, aún sin fecha, Patxi López se ha postulado como la "referencia política" de ese nuevo patriotismo, ofreció "diálogo y mano tendida" al lehendakari, Juan José Ibarretxe, siempre y cuando tenga "voluntad de rectificar" y de "reconducir esta grave situación general de desencuentro". Como paso previo a ese entendimiento, López apuesta por "explorar" con el nuevo presidente del PNV, Josu Jon Imaz, y con los partidos democráticos "todas las posibilidades de acuerdo que sean razonables".

El "segundo impulso estatutario" es el camino que Patxi López ha elegido para lograr sus propósitos "frente a un nacionalismo agotado y encastillado en sus intereses partidistas" y "una derecha española y un Partido Popular que no han solucionado nada porque han hecho de la confrontación permanente su exclusiva seña de identidad". Su propósito es la "construcción de Euskadi "de una manera más parecida al modelo catalán de Pasqual Margall que al del pacto de Lizarra o la calle Génova (sede central del PP en Madrid)".
 
Tampoco en esta ocasión se ha olvidado de su antecesor en el cargo, Nicolás Redondo Terreros, ausente en el acto pero representado por el sector que apoya un mayor entendimiento entre el PSE y el PP. Patxi López les ha vuelto a acusar de intentar crear divisiones y trasladar a la sociedad un mensaje de crispación interna que a su juicio es inexistente.

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