L D (EFE) Las previsiones oficiales de crecimiento sitúan el aumento del PIB el año pasado en el 2,3 por ciento (una décima menos que lo esperado por la citada entidad financiera) y en el 3 por ciento en 2004 (medio punto por encima de lo previsto por el banco).
Los analistas del BBVA creen que el empleo crecerá este año a una tasa ligeramente superior al dos por ciento en términos EPA, frente al 2,6 por ciento esperado para 2003, pero la tasa de paro se elevará, desde el 11,3 al 11,7 por ciento de los activos, como consecuencia del mayor incremento de la población activa.
Asimismo, opinan que la inflación cerró el 2003 con un aumento del 2,5 por ciento y auguran una moderación de dos décimas este año, mientras que la tasa subyacente se mantendrá estable, según sus cálculos, en el 2,5 por ciento. En su último informe de coyuntura, el Servicio de Estudios del BBVA señala que el crecimiento español será más dependiente en 2004 del entorno internacional, que incidirá sobre las expectativas y la riqueza financiera de los hogares y sobre las perspectivas empresariales.
Sin embargo, agrega, a pesar de estos impulsos positivos, la demanda se desacelerará respecto al 2003, al agotarse el impulso sobre la renta de los hogares de la reforma del IRPF y al finalizar las continuas caídas de tipos de interés reales de los últimos años. Así, apunta un aumento de la demanda nacional del 3,4 por ciento el ejercicio pasado, que se reducirá al 3,1 por ciento este año, tendencia contraria a la prevista por el Ejecutivo, que espera una aceleración del 3,1 al 3,3 por ciento. Según el BBVA, la aportación negativa del sector exterior disminuirá desde el uno al 0,6 por ciento -la previsión oficial fija una mejora del 0,9 al 0,4 por ciento-, gracias al creciente dinamismo de las exportaciones y pese a una cierta moderación en el crecimiento de las importaciones.
Dentro de la demanda interna, esta entidad cree que se moderará la expansión del gasto, tanto de las familias (del tres al 2,7 por ciento) como de las administraciones públicas (del 3,8 al 3,1 por ciento), frente a los cálculos del Gobierno que espera una aceleración del consumo privado (del 2,8 al 3,1 por ciento) y una ralentización del sector público (del 3,2 al 2,9 por ciento). En cuanto a la inversión, el BBVA opina que avanzará desde un aumento del 3,2 por ciento en 2003 al 3,5 por ciento en 2004, en tanto que el Ejecutivo prevé una subida del 3,3 al 3,8 por ciento. Los analistas confían en que la inversión en equipo registrará una expansión desde el 2,5 al seis por ciento (la previsión oficial varía del 2,8 al 5 por ciento), mientras que se contendrá el avance de la actividad constructora, al pasar del 3,7 al 1,6 por ciento (el Gobierno espera una desaceleración menor, del 3,7 al tres por ciento).
En lo que se refiere a la política monetaria, el Servicio de Estudios de este banco considera que seguirá siendo "acomodaticia" tanto en Estados Unidos como en la zona euro en los próximos meses y vaticina que el BCE subirá los tipos "sin prisas", probablemente en el último trimestre del año, y por debajo de lo que actualmente descuenta el mercado. Por último, respecto a la cotización del euro frente al dólar, los expertos de esta entidad señalan que a corto plazo la divisa europea se mantendrá en niveles en torno a 1,20 dólares por unidad y reseña que, a medio plazo, será necesario "un cambio de sentimiento" respecto a la economía estadounidense para que el dólar recupere parte del terreno perdido.