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Bruselas exige la plena aplicación de la legislación comunitaria sobre Tecnologías de la Información

La Comisión Europea ha que el marco regulador y las tecnologías de las telecomunicaciones ya existen, pero para explotar plenamente sus posibilidades se necesita "un compromiso político claro y renovado al máximo nivel". En una comunicación aprobada el martes, Bruselas establece una serie de prioridades para sacar todas las ventajas potenciales de las nuevas tecnologías de las telecomunicaciones.

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L D ( EFE ) Entre ellas están la plena aplicación del nuevo marco regulador de las comunicaciones electrónicas, el aumento de la cobertura de la banda ancha en las zonas insuficientemente atendidas, el estímulo de la demanda y el desarrollo de la telefonía móvil de tercera generación (3G).
 
Para lograrlo, considera que es necesario aumentar las inversiones en tecnologías de la información y las comunicaciones, elementos claves para que prosiga el crecimiento y la creación de puestos de trabajo en Europa. "El crecimiento vendrá impulsado por la prestación de nuevos servicios a través de redes fijas e inalámbricas de alta velocidad que utilizan la banda ancha y de las comunicaciones móviles 3G", afirma el documento. Pero para lograrlo, la Comisión insiste en la necesidad de que los responsables de las políticas se esfuercen en crear unas condiciones favorables a la inversión rápida.
 
El comisario europeo de Sociedad de la Información, Erkki Liikanen, destacó la notable mejora experimentada en 2003, con un continuo crecimiento de la telefonía móvil, la banda ancha y los servicios de Internet. La mayor parte del aumento global de los ingresos procedió de los servicios móviles, aunque también siguieron expandiéndose la banda ancha y los servicios de Internet. El número de conexiones de banda ancha se multiplicó por dos en los doce meses precedentes a octubre de 2003, alcanzando una cifra cercana a los 20 millones en toda la UE.
 
No obstante, el número de abonos a la banda ancha varía considerablemente de un Estado miembro a otro, lo que demuestra que sigue siendo necesario actuar para evitar que la fractura digital se acentúe, afirma la comunicación. Los servicios de 3G comenzaron también a desarrollarse a mayor velocidad, con unos 500.000 abonados en cinco Estados miembros (Dinamarca, Bélgica, Holanda, Suecia y Finlandia). Además de en esos países, en Grecia, Italia, Portugal, España y el Reino Unido ya se han completado las estrategias nacionales en banda ancha y se espera que el resto de los países se unan a ese esfuerzo.
 
El Ejecutivo de la UE destaca asimismo que a finales de 2004 habrá más de 40 redes de 3G -4 de ellas en España- que prestarán servicios comerciales, impulsadas por la demanda de acceso para comunicaciones de datos a alta velocidad que permitan disponer de correo electrónico, acceso a Internet y servicios en línea mientras se efectúan desplazamientos.

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