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EEUU pide que la OTAN asuma un papel destacado en el conflicto entre palestinos e israelíes

El Gobierno de EEUU ha propuesto en la Conferencia de Seguridad de Munich, Alemania, que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) asuma un papel protagónico que permita el relanzamiento del proceso de paz en Oriente Medio. Fundamentalmente, la OTAN debería enviar una fuerza de interposición. En respuesta, Israel puso dos condiciones: "que existan dos Estados responsables y que tengan voluntad de paz".

L D ( Agencias ) El jefe del Comité de Asuntos Exteriores del Senado de EEUU, Richard Lugar, y el ministro de Planificación Internacional de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Nabil Shaat, abogaron en la Conferencia de Seguridad de Múnich porque la OTAN asuma un papel en Oriente Medio.
 
Richard Lugar evocó esta posibilidad en un discurso en el que dijo que la Alianza Atlántica debe "adaptarse para desempeñar un papel de responsabilidad en el esfuerzos transatlántico por llevar paz, justicia y seguridad a Oriente Medio". Shaat contestó a esta propuesta diciendo que "los palestinos no tenemos problemas con que la OTAN asuma una misión de mantenimiento de paz en la zona con la bendición de la ONU". El representante palestino se mostró seguro de que, si EEUU no puede asumir esa tarea por falta de efectivos, países europeos, países árabes o incluso Japón estarían dispuestos a hacerlo.
 
En el foro sobre el futuro para Oriente Medio en el que se produjeron estas intervenciones, el consejero de Seguridad Nacional de Israel, Giora Eiland, puso dos condiciones para que su país pueda "aceptar que se envíe una fuerza de interposición de la OTAN: que existan dos Estados responsables y que tengan voluntad de paz". Esas son condiciones indispensables para que sea efectiva una fuerza internacional, estimó el consejero israelí que puso como ejemplo el éxito de una fuerza de ese tipo en los altos de Golán, gracias a la buena voluntad siria y la falta de eficacia de la que actúa en la frontera con el Líbano. Esa fuerza no sólo no es capaz de garantizar seguridad, sino que a veces facilita que se cometan acciones contra Israel, añadió.
 
El representante israelí declaró, por otra parte, que para su país la iniciativa de Ginebra tiene "elementos buenos, pero no puede ser aceptada en su conjunto, pues tiene demasiadas ambigüedades que dejan espacio para la interpretación", como es el asunto de la cantidad de refugiados a los que se permitirá el retorno. El consejero hebreo rechazó la idea de que el conflicto palestino-israelí sea la causa de los males de la zona y afirmó que sin él los países de la región seguirían sufriendo los mismos problemas de desarrollo y autoritarismo que ahora.

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