L D ( Agencias ) La explosión, de autoría desconocida, ha dejado un enorme cráter a la entrada del edificio, agregaron las fuentes. Sweira ha vivido en relativa tranquilidad desde el final de la guerra el pasado abril y los atentados no han sido allí tan abundantes como en otras zonas cercanas, como la vecina Hilla.
Las comisarías de la nueva policía iraquí son uno de los blancos más golpeados por los grupos insurgentes iraquíes, que acusan a la policía de colaboracionismo con la Autoridad Provisional dirigida por el estadounidense Paul Bremer.