L D (EFE) La pareja, que llegó el viernes alrededor de las 21,40 horas al hotel en el que se aloja en la estación invernal, salió a esquiar sobre las 10,30 horas ante la curiosa mirada de los esquiadores congregados en la estación, con los que han intercambiado algunas palabras, pese a que las precipitaciones de nieve y el frío están siendo las notas predominantes de la jornada.
Eduardo Roldán ha explicado que la nevada caída a lo largo de la noche y de esta misma mañana ha propiciado unas condiciones "muy buenas de la nieve con temperaturas de 9 y 10 grados bajo cero", lo que permite "una forma de esquiar muy invernal". No obstante, reconoce que la visibilidad "es bastante escasa", lo que ha limitado sus descensos, que se han desarrollado en cimas de "entre 1.500 y 2.000 metros", en pistas como Tobazo o el Puente.
Roldán, que recientemente impartió un curso de esquí a la prometida del Príncipe en la estación catalana de Baqueira Beret, ha dicho que Letizia "ha sorprendido al personal y ha superado las dificultades". Letizia Ortiz vestía un mono gris con una raya negra, mientras que el príncipe de Asturias eligió para la ocasión un mono negro. La pareja tiene intención de permanecer en el centro invernal hasta el domingo, jornada que también aprovechará para practicar el deporte blanco antes de regresar a Madrid.