L D (Agencias) La escenificación de las críticas no parece que vaya a impedir que Artur Mas se convierta en el "honorable señor jefe de la oposición" del Parlamento catalán. Se trata de un cargo vía decreto por el que Mas tendría un trato preferencial del Gobierno de la Generalidad. En teoría, conlleva sueldo equiparable al de un consejero, protocolo específico y atribuciones.
Dos de los partidos del bloque de gobierno, PSC e ICV, lo han apoyado sin reticencias. ERC se ha quejado de que se eleve a "un diputado más" a rango de jefe y ha llegado a advertir de que si la regulación de esaa figura pasa por el Parlemento votarán en contra. Lo defendía Josep Huguet, portavoz de ERC. Sin embargo, el consejero jefe de Maragall, Josep Bargalló, también de ERC, ha terminado justificando la decisión limitándose a errores de forma. De hecho, se ha convencido de que así se recuerda a CiU que está en la oposición.
De todas formas, parece que el PSC no tenía previsto hacer mucho caso a las críticas de ERC. Miquel Iceta ha recordado que el compromiso de regular la figura del "jefe de la oposición" estaba contenido en el discurso de investidura del presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y ha añadido que el decreto aprobado por el gobierno catalán "cuenta con el pleno apoyo del grupo socialista". Respecto a la oposición de ERC, Iceta ha indicado que "por lo que tenemos entendido se trata de una decisión de gobierno, y por tanto, apoyada solidariamente por sus miembros, incluidos los de ERC".
Según el portavoz del PSC, "todo lo que sea reconocer el papel de las personas que tienen que ejercer el control y la crítica al gobierno nos parece positivo. A la política catalana le hacía falta mayores dosis de consenso y si esta medida supone una contribución a la misma, bienvenida sea", ha añadido.
El grupo del PP, en cambio, se ha mostrado contrario al decreto y su portavoz, Daniel Sirera, ha subrayado que el sistema parlamentario catalán "no es bipartidista", y que "existe un grupo en esta cámara, el del PP, que tiene 15 diputados y que cuenta con el apoyo de 400.000 ciudadanos en las pasadas elecciones catalanas, y este grupo no se siente representado por el señor Artur Mas como supuesto jefe de la oposición". Sirera se ha mostrado, además, "absolutamente convencido de que Artur Mas no aceptará el cargo y ahorrará recursos a los ciudadanos de Cataluña". Sin embargo, parece que Mas podría renunciar al sueldo pero no al cargo. También de forma progresiva se ha idoi convenciendo de que puede ser una buena idea.
Empezó por confesar que se había enterado "por la prensa", este mismo miércoles, de la regulación de la figura del jefe de la oposición, por lo que considera que ha habido "un problema de formas muy importante", aunque no considera que el decreto aprobado sea "un error total". De hecho, durante una entrevista en Radio Barcelona de la cadena SER, admitió que no le parece "ni bien ni mal".
Según el portavoz del PSC, "todo lo que sea reconocer el papel de las personas que tienen que ejercer el control y la crítica al gobierno nos parece positivo. A la política catalana le hacía falta mayores dosis de consenso y si esta medida supone una contribución a la misma, bienvenida sea", ha añadido.
El grupo del PP, en cambio, se ha mostrado contrario al decreto y su portavoz, Daniel Sirera, ha subrayado que el sistema parlamentario catalán "no es bipartidista", y que "existe un grupo en esta cámara, el del PP, que tiene 15 diputados y que cuenta con el apoyo de 400.000 ciudadanos en las pasadas elecciones catalanas, y este grupo no se siente representado por el señor Artur Mas como supuesto jefe de la oposición". Sirera se ha mostrado, además, "absolutamente convencido de que Artur Mas no aceptará el cargo y ahorrará recursos a los ciudadanos de Cataluña". Sin embargo, parece que Mas podría renunciar al sueldo pero no al cargo. También de forma progresiva se ha idoi convenciendo de que puede ser una buena idea.
Empezó por confesar que se había enterado "por la prensa", este mismo miércoles, de la regulación de la figura del jefe de la oposición, por lo que considera que ha habido "un problema de formas muy importante", aunque no considera que el decreto aprobado sea "un error total". De hecho, durante una entrevista en Radio Barcelona de la cadena SER, admitió que no le parece "ni bien ni mal".
Poco después aclaró que su formación acepta que se instituya dicha figura, pero ha precisado que la creación de la misma tiene que realizarse por consenso y mediante aprobación del Parlament y no a través de un decreto. "Creemos -ha precisado- que si se crea esta figura ésta debe quedar para siempre, y esto significa hacer las cosas bien, no nos podemos enterar por la prensa y debe buscarse el máximo acuerdo posible en el Parlament".
Mas ha anunciado que, en cualquier caso, renuncia ya desde ahora mismo al sueldo que contempla el decreto "para que nadie pueda pensar que la actuación de CiU y la mía en particular dependen de una retribución del departamento de Presidencia".
El jefe de la oposición tendrá derecho a "contrastar" con el presidente de la Generalitat "asuntos de gran importancia para el país, como son los que puedan afectar a las instituciones básicas de Cataluña, su proyección exterior, el régimen de autogobierno o cualquier otro que el presidente considere". Según ha explicado el consejero portavoz del gobierno catalán, Joaquim Nadal, la regulación de la figura del jefe de la oposición supone una forma de reconocer el valor de "la alternancia" en el poder, y tendrá la virtud de que sea llamado a consultas por el presidente de la Generalitat "de forma periódica", algo que "durante 23 años no ha ocurrido".