L D (EFE) Estos datos forman parte del Indicador de Confianza Empresarial (ICE), elaborado a partir de encuestas realizadas a 4.000 empresas una semana después de las elecciones generales que dieron el Gobierno al PSOE.
Este es el segundo ICE consecutivo que muestra un aumento de la confianza de los empresarios en la economía española y, en este caso, tal percepción se basa en gran parte en que casi la mitad de las empresas encuestadas, el 45,5 por ciento, espera aumentar su facturación. Asimismo, el 33,9 por ciento de ellas cree que incrementará sus ventas en los mercados exteriores, el 56,2 por ciento las mantendrá y el 9,9 por ciento las reducirá.
El 14,3 por ciento de las empresas espera aumentar su inversión actual, el 81,4 la mantendrá y el 4,3 por ciento invertirá menos, mientras que el 9,6 por ciento de estas sociedades cree que aumentará su plantilla, el 86,5 mantendrá el número de trabajadores contratados y el 3,9 por ciento lo reducirá. Los datos reflejan que la confianza creció en la industria, el comercio y en otros servicios y hostelería, mientras que en la construcción, la confianza cayó "levemente" y, "aunque sólo retrocede una décima con respecto a los tres meses anteriores, ya son cuatro los trimestres en los que la confianza se reduce".
Por tamaños, la confianza de las empresas de mayor dimensión se sitúa por encima de las empresas más pequeñas. Para el segundo trimestre, las Cámaras prevén un crecimiento interanual del PIB del 2,8 por ciento, que se apoya en un comportamiento favorable de la demanda externa, gracias a la mejoría esperada en la economía internacional. Según las Cámaras, la paulatina recuperación de la economía europea hace que los empresarios sean más optimistas ante el futuro, hecho que queda reflejado en las exportaciones, donde se esperan "avances considerables".
Las Cámaras también destacan la "favorable evolución de la cifra de negocio en todos los sectores", lo cual "requerirá un incremento de las contrataciones", principalmente en la hostelería y el turismo, mientras que el sector comercial moderará la intensidad de la creación de empleo. Como factores que limitan la actividad de las empresas, las Cámaras señalan la debilidad de la demanda y el aumento de la competencia, que se traduce en que los productos procedentes de terceros países tengan precios más competitivos. El apartado "otras causas" reduce su importancia, por lo que las Cámaras concluyen que "los trágicos acontecimientos de marzo en Madrid han tenido un efecto muy limitado en la actividad económica del país".
Este es el segundo ICE consecutivo que muestra un aumento de la confianza de los empresarios en la economía española y, en este caso, tal percepción se basa en gran parte en que casi la mitad de las empresas encuestadas, el 45,5 por ciento, espera aumentar su facturación. Asimismo, el 33,9 por ciento de ellas cree que incrementará sus ventas en los mercados exteriores, el 56,2 por ciento las mantendrá y el 9,9 por ciento las reducirá.
El 14,3 por ciento de las empresas espera aumentar su inversión actual, el 81,4 la mantendrá y el 4,3 por ciento invertirá menos, mientras que el 9,6 por ciento de estas sociedades cree que aumentará su plantilla, el 86,5 mantendrá el número de trabajadores contratados y el 3,9 por ciento lo reducirá. Los datos reflejan que la confianza creció en la industria, el comercio y en otros servicios y hostelería, mientras que en la construcción, la confianza cayó "levemente" y, "aunque sólo retrocede una décima con respecto a los tres meses anteriores, ya son cuatro los trimestres en los que la confianza se reduce".
Por tamaños, la confianza de las empresas de mayor dimensión se sitúa por encima de las empresas más pequeñas. Para el segundo trimestre, las Cámaras prevén un crecimiento interanual del PIB del 2,8 por ciento, que se apoya en un comportamiento favorable de la demanda externa, gracias a la mejoría esperada en la economía internacional. Según las Cámaras, la paulatina recuperación de la economía europea hace que los empresarios sean más optimistas ante el futuro, hecho que queda reflejado en las exportaciones, donde se esperan "avances considerables".
Las Cámaras también destacan la "favorable evolución de la cifra de negocio en todos los sectores", lo cual "requerirá un incremento de las contrataciones", principalmente en la hostelería y el turismo, mientras que el sector comercial moderará la intensidad de la creación de empleo. Como factores que limitan la actividad de las empresas, las Cámaras señalan la debilidad de la demanda y el aumento de la competencia, que se traduce en que los productos procedentes de terceros países tengan precios más competitivos. El apartado "otras causas" reduce su importancia, por lo que las Cámaras concluyen que "los trágicos acontecimientos de marzo en Madrid han tenido un efecto muy limitado en la actividad económica del país".