LD (EFE) Según los últimos datos del Banco de España, la riqueza financiera neta de los hogares españoles se situó al finalizar 2003 en 758.508 millones de euros, frente a los 675.769 millones de 2002, una cantidad que representaba en aquel momento el 97,1 por ciento del PIB.
Los pasivos –deudas– de la familias han aumentado en los últimos años a una media anual de casi cuatro puntos del PIB, desde los 200.000 millones de 1996, equivalentes al 43,1 por ciento, hasta los 507.585 millones de 2003, el 68,3 por ciento del PIB, su máximo histórico. Los bajos tipos de interés –el mejor reclamo para endeudarse– y el incremento del precio de las viviendas han sido dos de los motivos que han ocasionado el incremento de los pasivos financieros de las familias.
Sin embargo, los activos –depósitos, efectivo, acciones, seguros y fondos– han tenido un comportamiento más irregular desde 1996, y aunque en 2003 han conseguido un nuevo máximo histórico en valor absoluto , 1,26 billones de euros, no ha sido así en comparación al PIB. El estallido de la llamada "burbuja tecnológica" y la caída de la bolsa han sido los motivos de esta irregular marcha de los activos financieros. Por eso, los activos financieros de las familias terminaron 2003 con un valor del 170,4 por ciento del PIB, 12 puntos menos que en 1999, cuando equivalían al 182 por ciento.
Los pasivos –deudas– de la familias han aumentado en los últimos años a una media anual de casi cuatro puntos del PIB, desde los 200.000 millones de 1996, equivalentes al 43,1 por ciento, hasta los 507.585 millones de 2003, el 68,3 por ciento del PIB, su máximo histórico. Los bajos tipos de interés –el mejor reclamo para endeudarse– y el incremento del precio de las viviendas han sido dos de los motivos que han ocasionado el incremento de los pasivos financieros de las familias.
Sin embargo, los activos –depósitos, efectivo, acciones, seguros y fondos– han tenido un comportamiento más irregular desde 1996, y aunque en 2003 han conseguido un nuevo máximo histórico en valor absoluto , 1,26 billones de euros, no ha sido así en comparación al PIB. El estallido de la llamada "burbuja tecnológica" y la caída de la bolsa han sido los motivos de esta irregular marcha de los activos financieros. Por eso, los activos financieros de las familias terminaron 2003 con un valor del 170,4 por ciento del PIB, 12 puntos menos que en 1999, cuando equivalían al 182 por ciento.