L D (EFE) La victoria no sólo pusieron a los Lakers con 1-0 en la serie al mejor de siete sino que además se quedaron con la ventaja de campo y el mensaje de que son sin discusión el equipo a batir. O'Neal, como se esperaba, fue una fuerza imparable bajo los aros y sus 27 puntos (9 de 16 tiros de campo y 9 de 11 desde la línea de personal), con 18 rebotes, cinco asistencias y no dejó ninguna duda de su protagonismo y estrella del partido. Bryant tampoco quiso quedarse atrás y con 23 puntos (9 de 20 tiros de campo y 5 de 8 de personal), seis asistencias, tres rebotes y tres tapones volvió a ser el complemento ideal para el juego dominador de O'Neal.
Pero todavía iba a estar el apoyo del veterano alero Karl Malone, que sin la presión de ser el líder, se siente mucho más cómodo, aportó 17 puntos, 11 rebotes y cuatro asistencias para ser el tercer pilar en el que se cimentó el triunfo de los Lakers. El factor sorpresa volvió protagonizarlo el base reservas Derek Fisher, que ante el falló de nuevo del veterano Gary Payton, aportó 14 puntos, que fueron decisivos para los Lakers, que tuvieron un 47,4 por ciento de acierto en los tiros de campo, el 40 en los triples y el 73,9 desde la línea de personal. Los Lakers dominaron el apartado de los rebotes con 38 y el de las asistencias con 29 por 35 y 18, respectivamente, para los Timberwolves.
El alero Latrell Sprewell lideró el ataque de los Timberwolves con 23 puntos, pero Garnett no fue factor al quedarse con sólo 16 (7 de 15 tiros de campo) y 10 rebotes. El base Sam Cassell tampoco lo hizo bien en el ataque y se quedó con 16 puntos, pero 5 de 14 tiros de campo, ocho asistencias y un rebote. El pívot Michael Olowokandi hizo un buen trabajo en el marcaje sobre O'Neal hasta que tuvo fuerza física y sus 10 puntos y 11 rebotes en 33 minutos ayudaron a su equipo, pero no lo suficiente para contrarrestar la producción del pívot más dominante que hay en la liga.
Pero todavía iba a estar el apoyo del veterano alero Karl Malone, que sin la presión de ser el líder, se siente mucho más cómodo, aportó 17 puntos, 11 rebotes y cuatro asistencias para ser el tercer pilar en el que se cimentó el triunfo de los Lakers. El factor sorpresa volvió protagonizarlo el base reservas Derek Fisher, que ante el falló de nuevo del veterano Gary Payton, aportó 14 puntos, que fueron decisivos para los Lakers, que tuvieron un 47,4 por ciento de acierto en los tiros de campo, el 40 en los triples y el 73,9 desde la línea de personal. Los Lakers dominaron el apartado de los rebotes con 38 y el de las asistencias con 29 por 35 y 18, respectivamente, para los Timberwolves.
El alero Latrell Sprewell lideró el ataque de los Timberwolves con 23 puntos, pero Garnett no fue factor al quedarse con sólo 16 (7 de 15 tiros de campo) y 10 rebotes. El base Sam Cassell tampoco lo hizo bien en el ataque y se quedó con 16 puntos, pero 5 de 14 tiros de campo, ocho asistencias y un rebote. El pívot Michael Olowokandi hizo un buen trabajo en el marcaje sobre O'Neal hasta que tuvo fuerza física y sus 10 puntos y 11 rebotes en 33 minutos ayudaron a su equipo, pero no lo suficiente para contrarrestar la producción del pívot más dominante que hay en la liga.