L D (EFE) El ex director gerente del Fondo Monetario Internacional recuperó para la oposición conservadora-liberal la presidencia de la República Federal de Alemania, al imponerse claramente a la candidata del Gobierno de Gerhard Schroeder, la politóloga Gesine Schwan.
Koehler logró, ya en la primera ronda de votación, la mayoría absoluta con 604 votos del total de 1.204 asistentes a la Asamblea Federal y sucederá al frente del máximo cargo representativo del país al socialdemócrata Johannes Rau. La candidata de Schoder logró 589, diez más de los que suman el Partido Socialdemócrata, los Verdes y el pos-comunista Partido del Socialismo Democrático. El resto fueron abstenciones o nulos.
Alemania necesita "una reforma en profundidad", dijo Koehler tras su elección, reafirmando así anteriores pronunciamientos a favor de las reformas estructurales del Gobierno rojiverde. "La globalización marca cada vez más nuestras vidas", siguió, y Alemania está entre los países que "mayor provecho deben y pueden sacar de ella". Sin embargo, es misión de todos hacer que la globalización vaya también "en beneficio de los más pobres", afirmó el ex responsable del FMI.
La elección de Koehler se daba por hecha, ya que lo apoyaban la Unión Cristianodemócrata, la Unión Socialcristiana de Baviera y el Partido Liberal, mayoritarias en la Asamblea. El presidente de la RFA no se elige por voto ciudadano, sino por la Asamblea Federal, formada en esta ocasión por los 602 miembros del Bundestag, más 603 enviados de los estados federados, entre ellos personajes de la vida pública, deportistas o intelectuales.
Koehler logró, ya en la primera ronda de votación, la mayoría absoluta con 604 votos del total de 1.204 asistentes a la Asamblea Federal y sucederá al frente del máximo cargo representativo del país al socialdemócrata Johannes Rau. La candidata de Schoder logró 589, diez más de los que suman el Partido Socialdemócrata, los Verdes y el pos-comunista Partido del Socialismo Democrático. El resto fueron abstenciones o nulos.
Alemania necesita "una reforma en profundidad", dijo Koehler tras su elección, reafirmando así anteriores pronunciamientos a favor de las reformas estructurales del Gobierno rojiverde. "La globalización marca cada vez más nuestras vidas", siguió, y Alemania está entre los países que "mayor provecho deben y pueden sacar de ella". Sin embargo, es misión de todos hacer que la globalización vaya también "en beneficio de los más pobres", afirmó el ex responsable del FMI.
La elección de Koehler se daba por hecha, ya que lo apoyaban la Unión Cristianodemócrata, la Unión Socialcristiana de Baviera y el Partido Liberal, mayoritarias en la Asamblea. El presidente de la RFA no se elige por voto ciudadano, sino por la Asamblea Federal, formada en esta ocasión por los 602 miembros del Bundestag, más 603 enviados de los estados federados, entre ellos personajes de la vida pública, deportistas o intelectuales.