L D (EFE) El Plan de Estabilidad impone a los miembros de la Unión Europea un déficit máximo del 3 por ciento del PIB. Esta regla, según el informe, debería aplicarse de un modo más flexible, teniendo en cuenta la situación de cada país y la evolución de su deuda. Para Almunia, los plazos deberían modificarse en caso de crecimiento económico débil.
El documento, que debe ser aprobado el próximo jueves, ha sido revelado este lunes por el diario económico francés La Tribune, y va en la línea con lo adoptado por el Consejo Europeo. Para el organismo, el objetivo sería “lograr progresivamente un excedente presupuestario en periodo de coyuntura favorable, lo que crea un margen de maniobra necesario para hacer frente a las inflexiones de la coyuntura y contribuir a la viabilidad a largo plazo de las finanzas públicas”.
En cualquier caso, el informe no cuestiona las reglas del Pacto de Estabilidad, ya que señala que si no hubieran existido, el déficit primario en la zona euro habría sido superior al 0,9 del PIB en el periodo 1994-2003 y la deuda pública habría aumentado en ocho puntos.
Otra de las recomendaciones de Almunia es reforzar los mecanismos de gobierno económico en la UE, dando un papel más importante a las Grandes Orientaciones de Política Económica (GOPE). Su calendario de elaboración debería armonizarse, según el informe, con el de coordinación de las políticas presupuestarias nacionales. Así se fijaría un “semestre comunitario” para el establecimiento de las GOPE y otro “nacional” para que los Estados las traduzcan en políticas nacionales.