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Narbona rectifica y dice que los costes del Protocolo de Kioto podrían ser absorbidos por los CTC

El Plan Nacional para cumplir el Protocolo de Kioto tendrá un sobrecoste anual de entre 30 y 60 millones de euros, según Medio Ambiente. Aunque la ministra Narbona reconoció que esto repercutiría en la tarifa y el titular de Industria añadió que se penalizaría el derroche energético, Medio Ambiente afirma ahora que este sobrecoste podría ser asumido por la moratoria nuclear o los CTC (Costes de Transición a la Competencia).

El Plan Nacional para cumplir el Protocolo de Kioto tendrá un sobrecoste anual de entre 30 y 60 millones de euros, según Medio Ambiente. Aunque la ministra Narbona reconoció que esto repercutiría en la tarifa y el titular de Industria añadió que se penalizaría el derroche energético, Medio Ambiente afirma ahora que este sobrecoste podría ser asumido por la moratoria nuclear o los CTC (Costes de Transición a la Competencia).
(Libertad Digital) Según fuentes del Ministerio de Medio Ambiente consultadas por la agencia Efe, la emisión a la atmósfera de 94 millones de toneladas de gases contaminantes por parte del sector energético, cuando España sólo tiene asignadas 88 toneladas en el Protocolo de Kioto, costará a las empresas entre 30 y 60 millones, ya que España tendrá que comprar a otros países derechos de emisión por 6 millones de toneladas más.
 
Sin embargo, el ministerio afirma que ese sobrecoste podría ser absorbido con la moratoria nuclear y los costes de transición a la competencia (CTC), lo que significaría que las empresas afectadas, en vez de subir sus tarifas al público, pasarían la factura al Estado en forma de “subvención”, bien aumentando el importe de los CTC o el que cobran por la moratoria nuclear.
 
Según consta en el Protocolo de Kioto, los países, cuando excedan el importe de toneladas contaminantes que tienen asignadas, deberán acudir a los "mercados de emisión" para "comprar" cada tonelada de más que arrojen, y se calcula que cada una de ellas costará entre cinco y 10 millones de euros.

EFE afirma, citando fuentes del Ministerio, que la administración está haciendo un esfuerzo por abordar con todos los sectores los problemas derivados de la aplicación del Plan. Al parecer, ya se han mantenido reuniones con representantes del sector siderúrgico y refino, así como con el papelero, sindicatos, organizaciones ecologistas y Comunidades Autónomas. Según Medio Ambiente, las preocupaciones de estos sectores habrían quedado "bastante suavizadas", aunque faltan todavía algunos sectores por consultar, sectores con un alto consumo energético como es el caso del cementero.
 
Los ecologistas y los sindicatos están contentos pero vigilantes
 
El secretario general para la prevención de la contaminación y el cambio climático, Arturo Gonzalo Aizpiriz, se reunió con representantes de los grupos ecologistas ADENA, Ecologistas en Acción y Amigos de la Tierra. Los ecologistas reconocieron que el Plan de Emisiones del Gobierno "es un primer paso" pero se mostraron convencidos de que Kioto "no se va a cumplir" y exigieron un mayor esfuerzo a las compañías eléctricas.

La representante de UGT, Dolors Hernández, consideró que el Plan es "realista y flexible" y mostró su satisfacción por la decisión de constituir mesas sectoriales "para evitar el peligro de que se usen las negociaciones para hacer demagogia con el cierre y la deslocalización de empresas". En el mismo sentido se pronunció el responsable de Medio Ambiente de CCOO, Joaquín Nieto.

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