L D (EFE) Según la cadena Al Yazira, Sadam Husein compareció durante media hora ante el juez encargado de leerle –así como a once de sus lugartenientes– los doce cargos que pesan sobre él, entre ellos la comisión de genocidio y de crímenes de guerra.
Sadam Husein está acusado de perpetrar crímenes contra los kurdos y contra los chiíes, así como contra Irán y Kuwait, países con los que entró en guerra en 1980 (hasta 1988) y 1990, respectivamente.
Nuevos ataques terroristas
Por otro lado, dos iraquíes murieron y otros cinco resultaron heridos este jueves, entre ellos un alto responsable del Ministerio de Hacienda, a causa de la explosión de un artefacto de fabricación casera en una calle del oeste de Bagdad. La radio iraquí, que había informado de la muerte aquél en el atentado, le identificó como Ihsan Karim, corrigió su información y aseguró que se encuentra en estado grave en el hospital del barrio de Yarmuk, donde tuvo lugar el ataque.
La emisora, que citó fuentes hospitalarias, explicó que los dos muertos son el conductor de Karim y uno de sus guardaespaldas. Se desconoce hasta el momento si el atentado estaba dirigido contra el mencionado funcionario o contra un convoy militar norteamericano que pasaba por la misma calle en que se perpetró el atentado.
Asimismo, una enorme explosión se escuchó en el distrito capitalino de Al Azamiya, aunque se desconoce hasta el momento por qué motivo se produjo.
Por otra parte, siete personas perdieron la vida en Faluya –unos 50 kilómetros al oeste de Bagdad– como consecuencia del bombardeo aéreo que fuerzas estadounidenses lanzaron en la noche del miércoles contra un edificio del suroeste de la ciudad, según fuentes hospitalarias.
El portavoz del Ejército de EEUU, general Mark Kimmit, dijo que el ataque tuvo como blanco un escondite de la red del jordano Abu Musab al Zarqaui, jefe de la red terrorista Al-Qaeda en Irak y responsable de numerosos atentados.
Aumento de la recompensa por Zarqaui
Por otro lado, Washington ha aumentado de 10 a 25 millones de dólares la recompensa que ofrece por aquellas informaciones que permitan capturar a Zarqaui.
El Departamento de Estado indicó en un comunicado que el terrorista jordano tiene relaciones desde hace mucho tiempo con los líderes de Al-Qaeda, y que su organización es responsable de "numerosas atrocidades cometidas en Irak en los últimos meses, incluido el asesinato del ciudadano estadounidense Nick Berg", decapitado tras haber sido secuestrado.
El precio que se ha puesto por Zarqaui es el mismo que se puso en su día por Sadam Husein.