L D (EFE) El ex presidente del Gobierno José María Aznar ha afirmado que le merecen "desprecio" las informaciones. "No tengo nada que negar ni nada que afirmar. Simplemente digo que algunas afirmaciones que se hacen al respecto solamente me merecen desprecio", ha señalado Aznar en una entrevista concedida a la emisora mexicana W Radio.
Aznar, que se encuentra de visita en México para promocionar su libro "Ocho años de Gobierno. Una visión personal de España", consideró la información un intento de desviar la atención sobre cosas relacionadas con los atentados del 11-M en Madrid. "Quiero decir que cuando se intenta demostrar que un gobierno no ha dicho la verdad, el gobierno la ha dicho, y eso queda acreditado ante una comisión parlamentaria, se pueden intentar muchas cosas para desviar la atención, e incluso intentar manchar la honorabilidad de las personas, pero yo no voy a entrar en esas cosas", ha declarado Aznar, quien va a presentar su libro en la capital mexicana.
En sus primeras declaraciones desde que se conociera la denuncia, difundida el jueves, por la Cadena SER, el ex presidente del Gobierno y del Partido Popular (PP) ha señalado que "simplemente, cuando se plantean las cosas en unos términos que tienen muy poco que ver con la realidad, eso sólo merece desprecio". La información de la Cadena SER aseguró que Aznar contrató a la empresa de abogados "Piper Rudnick" el pasado enero para gestionar e impulsar la imagen de España en EEUU. El contrato, público y con cargo a PGE, ha sido mantenido por el PSOE.
Según Ana Palacio, este tipo de contratos es común y habitual en los gobiernos españoles desde 1983, y de hecho, el gobierno de Zapatero lo mantiene porque es una necesidad. La ex ministra de Exteriores ha asegurado que el único objetivo de esta polémica es manchar la imagen de honradez y solvencia del anterior gobierno. Palacio ha negado que se contratase al bufete estadounidense para conseguir la concesión medalla de oro del Congreso para el presidente José María Aznar. "Nada más lejos de la realidad. El objeto del contrato era apoyar la gestión por parte de la embajada de los intereses de España: intereses comerciales, culturales y de diplomacia", ha indicado. "Quiero dejar constancia de que la iniciativa de la medalla del Congreso al presidente fue bipartidista, partió de congresistas y no tuvo nada que ver ni el Gobierno ni la embajada. Es una iniciativa de congresistas republicanos y demócratas que, conjuntamente, promueven la idea de la medalla del Congreso para el presidente Aznar a primeros de mayo del año pasado, esto es, mucho antes del contrato", ha recalcado.