L D (EFE) Fernando Alonso llega al circuito germano ansioso de lograr un puesto de honor, después de haber sido segundo en Magny Cours, donde firmó la pole del Gran Premio de Francia; y décimo en el de Gran Bretaña, disputado en la pista inglesa de Silverstone, en la que el alemán Michael Schumacher confirmó su condición a los mandos del Ferrari, al ganar la décima carrera de las once que se han disputado este año.
En Silverstone, el genial piloto asturiano –quinto en el Mundial, con 33 puntos– criticó la falta de reflejos de los responsables de su escudería –segunda en el campeonato de constructores– tras el aparatoso accidente, afortunadamente sin consecuencias, de su compañero italiano Jarno Trulli, el único que ha roto la racha triunfal de "Schumi" esta campaña, al ganar en las calles del Principado de Mónaco.
Superadas, al menos sobre el papel, las diferencias, Alonso buscará mejorar el resultado logrado en Hockenheim el año pasado, cuando acabó cuarto en una prueba en la que se exhibió el colombiano Juan Pablo Montoya (Williams-BMW), que logró ese día la tercera de sus tres victorias en la categoría reina del gran motor, después de las de Monza (Italia) en 2001, y Montecarlo, también el año pasado. El bogotano, sexto en el Mundial, a cuatro puntos de Alonso, ganó la temporada pasada –marcando el récord de vuelta rápida (1:14.917)– en la pista de Baden-Wuerttemberg por delante del escocés David Coulthard (McLaren Mercedes) y de Trulli, que le acompañaron en el podio final. Superar lo logrado hace un año supondría que el piloto asturiano, de 22 años -el único español y el más joven de la historia en ganar una carrera de Fórmula Uno: el año pasado, en Hungría-, subiría por séptima vez en su carrera (la tercera esta temporada, en la que fue tercero en el estreno de Australia) al podio en una prueba de la categoría reina.
En Hockenheim, circuito de 4.574 metros al que el domingo está previsto que se den un total de 67 vueltas para completar un recorrido de 306,458 kilómetros, no pilotará en un principio el catalán Marc Gené, probador de Williams-BMW, que sustituyó al lesionado Ralf Schumacher –accidentado en Indianápolis– en Francia y en Inglaterra. Gené concluyó décimo en Magny Cours y duodécimo en Silverstone y la escudería que dirige Frank Williams, que espera poder contar de nuevo con Ralf en el Hungría, donde se correrá el siguiente Gran Premio, ha decidido darle una oportunidad al otro probador, el brasileño Antonio Pizzonia. En espera de una sorpresa que anime algo un Mundial cuyas pruebas acaban casi siempre con el mismo vencedor, Schumacher, que logró en Silverstone la octogésima victoria de su carrera en F1, lidera con cien puntos, 26 más que su compañero brasileño Rubens Barrichello.
El inglés Jenson Button (BAR-Honda) es tercero, con 53, siete más que Trulli -cuarto-, que junto a Alonso suma 79 puntos para la Renault del italiano Flavio Briatore, segunda en el Mundial de constructores, aunque a casi cien puntos de la 'galáctica' escudería de los coches rojos de Maranello.